El serbio Novak Djokovic, número 1 mundial y gran favorito para hacerse con el triunfo final en el ATP 500 de Viena, se estrenó con un apretado triunfo ante su compatriota Filip Krajinovic, por 7-6 (6) y 6-3, en la segunda ronda del certamen.
Djokovic, que curiosamente había caído ante Krajinovc en dos de los tres precedentes duelos entre ambos, precisó de 1 hora y 59 minutos y dos bolas de partido para hacerse con el mismo.
El número 1 del mundo se adelantó en el compromiso 3-1, tras romper el saque de su compatriota en el cuarto juego. Pero, vio como Krajinovic le daba la vuelta con cuatro juegos consecutivos que le pusieron con un favorable 3-5, generando que en el décimo juego pudiera sacar para hacerse con el primer parcial.
Lo evitó Djokovic, que subió su ritmo, logrando una rotura de saque que hizo que el set tuviese que sentenciarse en el decisivo decimotercer juego. Ahí, Krajinovic desaprovechó una bola para adjudicárselo, lo que no desechó luego «Nole».
La segunda manga fue más cómoda. El múltiple campeón de Grand Slams se mostró firme con su saque, rompiendo en dos ocasiones el servicio de su rival. Esto sentenciaría la contienda en su favor.
En los cuartos de final, Novak se medirá al croata Borna Coric, que en primer turno había derrotado al estadounidense Taylor Harry Fritz, por un doble 6-4.