Los ministros españoles de Defensa, Margarita Robles, e Interior, Fernando Grande-Marlaska, tendrán que declarar como testigos ante el juez que investiga el presunto espionaje a través del programa Pegasus al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a numerosos líderes independentistas catalanes.
La Audiencia Nacional española instruye la causa por la presunta infección con Pegasus de los teléfonos móviles de cuatro altos cargos del Gobierno de España, entre ellos Robles y Marlaska, y cerca de sesenta líderes independentistas de Cataluña, encabezados por el presidente de esa región, Pere Aragonès.
A principios de julio, Aragonès, del partido Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), presentó también una querella ante los juzgados de Barcelona para que se investiguen los ataques que sufrió su teléfono en enero de 2020, en plena negociación de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Ejecutivo español.
Dos ministros españoles citados
ERC es uno de los grupos que presta apoyos parlamentarios puntuales al Gobierno de coalición en España entre el partido socialista PSOE y la formación de izquierda Unidas Podemos.
El supuesto espionaje coincidió además con los años más convulsos en Cataluña, cuando el Gobierno regional catalán convocó en 2017 un referéndum de secesión declarado ilegal por el Tribunal Constitucional español.
Varios políticos como el expresidente del Gobierno catalán y actual eurodiputado Carles Puigdemont, huido de la Justicia española tras ser procesado por esa declaración unilateral de independencia, anunciaron que llevarían ante la Justicia al Estado español y a la empresa israelí NSO, que desarrolló el programa.
El pasado 7 de julio una jueza de Barcelona abrió la primera investigación en España a NSO, a raíz de una querella presentada por el abogado de un partido independentista catalán que denunció el espionaje a su teléfono móvil.
Mientras tanto, la Audiencia Nacional española investiga el jaqueo de los móviles de los miembros del Gobierno español.
Antes de Robles y Marlaska fueron llamados a declarar también como testigos la exdirectora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Paz Esteban, que fue sustituida en su cargo tras revelarse el espionaje el pasado mayo, y el ministro español de la Presidencia, Félix Bolaños.
Bolaños dijo este jueves que el Gobierno español prestará toda la colaboración que sea necesaria a la Justicia para la investigación.