Aunque en agosto hubo una desaceleración de la inflación en el país, el economista y profesor universitario, José Guerra, aclara que la hiperinflación no ha terminado.
El experto declaró al programa Lo de Hoy, que conduce Dhameliz Díaz en Unión Radio, donde señaló que la desaceleración, aunque la inflación sigue estando altísima, se produjo porque el dólar ha estado estable.
“El Banco Central de Venezuela ha estado quemando dólares para tratar de calmar al mercado, y esa estabilidad se ha trasladado a los precios de los bienes y servicios”.
Subrayó que Venezuela sigue en un proceso de hiperinflación, que comenzó en noviembre de 2017 y demolió el salario de los venezolanos, que hoy están en total precariedad.
Guerra negó la especie según la cual la economía venezolana habría arrancado, después de haber estado estancada. Precisó que la economía se mide por tres indicadores básicos. Uno de ellos es la inflación, que en el caso de Venezuela sigue alta, con un 1.500 por ciento, en los 12 meses que terminaron en agosto.
El segundo es el crecimiento de la actividad económica, donde no se aprecia ningún signo firme de recuperación, por cuanto la producción petrolera y la actividad manufacturera siguen contraídas.
Y el tercer elemento son las reservas del Banco Central de Venezuela, que lejos de aumentar, han disminuido.
“De manera que no se puede hablar de una recuperación de la economía todavía”.
José Guerra comentó que con la existencia de los bodegones se está dando una falsa apariencia de que se está recuperando la economía, pero eso no es del todo así, porque en el caso de Caracas se ha demostrado que sólo un 25 por ciento de la población ha comprado alguna vez en este tipo de establecimiento.
Mientras tanto los trabajadores de la administración pública, siguen ganando 12 veces menos que los del sector privado.