La subsecretaria de organismos internacionales de Ecuador, María Carola Íñiguez, se sumó a Bolivia y Nicaragua en el rechazo a la convocatoria de la reunión de cancilleres de hoy en la OEA sobre Venezuela y consideró que recuerda «a épocas oscuras».
La diplomática indicó que «es preocupante que queramos imponer soluciones» a Venezuela, algo que, a su juicio, «solo recuerda a épocas oscuras cuando la OEA era un instrumento para imponer agendas en nuestra región».
«Lamentamos la convocatoria de la reunión, que se realice violentando procedimientos establecidos y sobre todo sin el consentimiento de Venezuela«, sostuvo la diplomática en su intervención, de seis minutos como la de cada Estado.
Asimismo, señaló que «si analizamos estos aspectos encontramos que otros países están inmersos en los mismos problemas, muchas veces agravados de manera exponencial».
«En la región tenemos países de los más violentos del mundo y de los más desiguales y eso falta a la protección de los derechos humanos», sostuvo, sin dar nombres de ninguna nación en concreto.
Aunque afirmó que «Venezuela atraviesa una crisis», subrayó que «los conflictos de Venezuela deben ser resueltos por los venezolanos», sin «imposiciones» externas.
Ecuador es, junto a Bolivia y Nicaragua, uno de los aliados regionales más fieles a Venezuela y siempre se posiciona a su favor en la OEA.
Venezuela pidió su salida de la OEA el pasado 28 de abril por la convocatoria de esta reunión de cancilleres contra su voluntad, aunque no será efectiva hasta 2019.
Los cancilleres americanos llegan divididos a su primera reunión sobre la crisis de Venezuela, con dos proyectos de declaración sobre la mesa -Antigua y Barbuda anunció hoy que retiró el suyo- que por el momento parecen difíciles de conciliar para lograr aprobar un texto común, lo que requiere el apoyo de dos tercios de los 34 Estados acreditados -todos menos Cuba-, es decir, 23.
Venezuela está inmersa desde el pasado 1 de abril en una ola de protestas convocadas tanto por el Gobierno como por la oposición, muchas de las cuales han derivado en hechos violentos que dejan al menos 59 muertos y un millar de heridos.
