«Este crimen no puede quedar impune. Hay que responder con dureza y decisión», afirmó Piotr Tolstoi, vicepresidente de la Duma del Estado, la Cámara de Diputado de Rusia.
Un grupo llamado Ejército Nacional Republicano ha reivindicado el atentado. Es una desconocida agrupación rusa que dice tener como objetivo derrocar al presidente Putin.
Las autoridades ucranianas negaron toda implicación
La noche del sábado, a las afueras de Moscú, Daria Dúguina de 29 años murió al estallar un bomba en su vehículo tras salir de un festival donde había estado con su padre, un ideólogo ultranacionalista que apoya la guerra en Ucrania.
Según el digital Gazeta.ru, que cita un canal de Telegran, Duguin tenía previsto regresar a Moscú en coche de su hija, pero cambió de opinión en el último momento.
¿Quién es Alexandr Duguin?
Duguin, de 60 años, escritor y filósofo, es considerado uno de los ideólogos que más ha influido en la política rusa de los últimos años y en particular en el rumbo adoptado por el presidente Putin.
En su juventud profesó un anticomunismo y antisovietismo radical que abandonó tras la caída de la Unión Soviética, al punto que en 1993 defendió con los comunistas la sede del Parlamento de Rusia cañoneado por orden del entonces presidente ruso, Borís Yeltsin.
Más tarde participó en la fundación del Partido Nacional Bolchevique, una formación opositora radical ya desaparecida.
A partir del año 2000 Dugin defiende las ideas de euroasianismo y el conservadurismo, que propone como plataforma ideológica a las autoridades del país, a la que acusa de carecer de toda ideología.
Desde 2015 se encuentra bajo sanciones de Estados Unidos por «acciones o políticas que amenazan la paz, la seguridad, la estabilidad o la soberanía o la integridad territorial de Ucrania».
En marzo de 2022, después del comienzo de la «operación militar especial» rusa en Ucrania, su fallecida hija también fue sancionada por Estados Unidos por su labor como directora de la web United World International (UWI), calificada por Washington como «un medio de desinformación».
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