El descarrilamiento en la noche del sábado del tren de pasajeros que cubría la línea Atenas-Salónica en la localidad de Ádendro, en el norte de Grecia, dejó finalmente dos muertos y siete heridos, tres de ellos graves, informó hoy la empresa nacional de ferrocarriles (TRAINOSE) en un comunicado.
Uno de los heridos graves se encuentra intubado en el hospital, por lo que su pronóstico es incierto y su vida corre peligro.
Los equipos de rescate trabajaron gran parte de la noche para asegurarse de que no quedaba nadie entre los restos del tren, mientras los heridos eran trasladados a centros hospitalarios de la ciudad de Salónica y alrededores.
Los cinco vagones y la locomotora del tren, que partió de Atenas cinco horas antes y llevaba 70 pasajeros a bordo, se salieron de las vías alrededor de las 21.40 hora local (19.40 GMT) a apenas 200 metros de la estación de tren de la localidad norteña, situada a unos 30 kilómetros de Salónica. La locomotora terminó empotrada en una casa cercana.
El ministro de Infraestructuras, Jristos Spirtzis, coordinó las labores de los equipos de emergencia y rescate e instó a que se aclaren las circunstancias del descarrilamiento lo antes posible.
«Las causas de la tragedia deben ser investigadas de inmediato», dijo por su parte el gobernador de la región de Macedonia central, Apóstolos Tzitzikostas, al tiempo que señaló que la empresa encargada de las vías nunca había informado de ningún problema con la red.
