El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, consideró este jueves «abominable» y «totalmente inaceptable» el hallazgo de decenas de cadáveres en camiones sin refrigerar frente a una funeraria, pero defendió que se trata de un caso aislado y que la ciudad está lidiando adecuadamente con el gran número de fallecimientos por la COVID-19.
La Policía de Nueva York, tras recibir llamadas de vecinos advirtiendo del mal olor, descubrió este miércoles alrededor de medio centenar de cuerpos almacenados en camiones de la cadena U-Haul, normalmente alquilados por horas para mudanzas, y sobre el suelo de la funeraria, con algunos cadáveres en estado de descomposición.
De Blasio consideró la situación «inaceptable» y recordó que las casas de funerales tienen la obligación de tratar «con dignidad» a quienes sirven.
«No tengo la menor idea de cómo una funeraria pudo dejar que esto ocurriese», insistió el alcalde, que recordó que el Ayuntamiento está apoyando a todas los funerarias que notifican dificultades, por lo que ésta debería haber avisado a las autoridades del desbordamiento que sufría.
Según dijo, tras este episodio se buscarán fórmulas para mejorar la comunicación y asegurar que nada así se repite.
De Blasio, en todo caso, recalcó que no se trata de un problema generalizado y que, mayoritariamente, las funerarias están gestionado de forma adecuada la difícil situación creada por la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2, que ha matado en la ciudad a más de 14.000 personas.
«La gran mayoría están haciendo un trabajo admirable», aseguró el político demócrata.
Ante la pandemia, hospitales, morgues y funerarias de Nueva York se han visto en muchos casos obligados a usar camiones refrigerados para mantener cuerpos a la espera de que las familias puedan enterrar a sus seres queridos.
Los agentes creen que la mayoría de los cuerpos eran de personas muertas por el coronavirus. EFE