Antes de culminar la marcha opositora en el estado Mérida, personas encapuchadas golpearon, quemaron la moto y desnudaron a un funcionario de la Policía de Mérida.
El policía identificado como José G. Marquina L., supuestamente fue atacado porque manifestantes lo acusaron de ser un infiltrado en el sector El Carrizal, cuando vieron que el oficial portaba un arma de fuego.
Varios sectores de la oposición rechazaron esta agresión y responsabilizaron a las autoridades regionales, por infiltrar a personas armadas durante las protestas convocadas por la Mesa de la Unidad Democrática.