Ana Rosario Contreras, presidenta de la Federación de Colegios de Profesionales de la Enfermería, aseguró este martes, que las enfermeras no van a seguir trabajando en los hospitales con la extrema pobreza en la que viven.
La profesional de la salud explicó en una rueda de prensa, todas las dificultades que atraviesa el gremio enfermero del país, y destacó el daño que ha causado el escaso salario que reciben, reseñó el portal web Punto de Corte.
El gremio exige la tabulación de su salario en 180 dólares, para poder equilibrarlo a realidad económica que atraviesa país.
“Muchas enfermeras no se han ido del país, simplemente están vendiendo tortas, o se dedican a otros oficios que al parecer le ofrece mayor retorno económico, mucho más que un salario por de la profesión en la que se formaron por cinco años”, aseveró.
Contreras, afirmó que, “como líderes gremiales, estarán prestos y dispuestos con todas las opciones sobre la mesa, para reivindicar al valiente gremio de enfermería, y restituirle al venezolano de a pie el derecho a la salud y una atención de calidad”.
Asimismo, la dirigente dio a conocer también la precaria condición de salubridad en la que se encuentran los hospitales en Venezuela.
“En este momento estamos expuestas a la insalubridad de los hospitales. Tenemos colegas contaminadas con tuberculosis, porque simplemente no hay como limpiar. Nuestros centros de salud cambiaron su olor a estéril y alcohol, por baños sucios”, detalló.
Dentro de las opciones que platean como gremio, Rosario no descartó un cese de las labores.
“Nadie puede obligar a un trabajador a seguir laborando en estas condiciones exponiendo su vida”, sentenció.