El presidente Evo Morales agradeció al papa Francisco la aprobación de la canonización de la beata española Nazaria Ignacia de Santa Teresa de Jesús March que realizó la mayor parte de su labor en Bolivia.
«Agradecemos al hermano papa Francisco por anunciar la próxima canonización de la hermana Nazaria Ignacia March, quien eligió la nacionalidad boliviana y dedicó su vida a la liberación de los pobres marginados. Primera vez en la historia que habrá una santa boliviana», escribió Morales en su cuenta de Twitter.
Resaltó que la religiosa trabajaba por la «recuperación de la identidad de los sectores excluidos».
«La hermana Nazaria fue muy valiente, inteligente e identificada con los mineros y la clase trabajadora», agregó Morales.
El sábado el Vaticano explicó en un comunicado que el papa Francisco reconoció el milagro que consentirá canonizar a la religiosa que fue beatificada en 1992 por el papa Juan Pablo II.
Nazaria Ignacia nació en Madrid en 1889, pero la mayor parte de su labor la realizó en Bolivia.
En 1908 la religiosa, a los 19 años, ingresó a las Hermanitas de los Ancianos Desamparados en México y en 1912 fue destinada a la ciudad boliviana de Oruro (oeste).
En 1925 fundó la Cruzada Pontificia, conocida hoy como Misioneras Cruzadas de la iglesia, considerada como la primera congregación «nativa» de Bolivia.
El trabajo de la religiosa en el país fue incansable creó comedores para los pobres, casas de acogida para los huérfanos.
En 1933 organizó a las mujeres de los mercados y comercios de Oruro para formar el que fue el primer sindicato obrero femenino de Bolivia.
Desempeñó una labor misionera en Bolivia, Uruguay, España y Argentina donde falleció el 6 de julio de 1943, pero sus restos fueron trasladados a Oruro en 1972, como lo pidió Nazaria Ignacia antes de morir.
