Una vez que la Policía colombiana abatió al capo venezolano “Willy Meleán”, en la lujosa hacienda de Santander donde se ocultaba, se empezó a difundir un audio en el que un presunto exmilitar venezolano celebra la caída de Meleán, cabecilla de la banda criminal ‘los Meleán’, que delinque en Colombia desde 2018, donde manejan microtráfico, prostíbulos, extorsión y sicariato, especialmente en Bogotá.
Con un marcado acento venezolano, el sujeto dice en el audio que la guerra va a continuar en Colombia y, de inmediato, subió a redes su armamento y el video de un nuevo crimen.
Reporta la web del diario neogranadino El Tiempo que el hombre al que se escucha está identificado por la Policía de Colombia como Erick Alberto Parra Mendoza, de 27 años, y de acuerdo con informes de inteligencia perteneció a la Guardia Nacional venezolana, en la que recibió entrenamiento en operaciones de comando, inteligencia, manejo de explosivos y combate.
También aporta que, antes de llegar a Colombia, Parra se convirtió en uno de los delincuentes más buscados del Zulia, donde nació, y de su país, lo que lo llevó a trasladar sus actividades criminales al país vecino, a Ecuador y Chile.
En efecto, cuando colgó el uniforme, se convirtió en el jefe de seguridad de los Meleán, una vieja familia de delincuentes venezolanos de la cual ‘Willy Meléan’ –abatido el sábado pasado por la Policía– pertenecía a la tercera generación.
“Yeico Masacre”
El patriarca de esta red delincuencial que hoy compite por ingresar al mapa criminal colombiano se llama Antonio Meleán. En su organigrama criminal también figura su hijo Tirso Meleán Castellanos y su sobrino Bernardino “Willy” Meleán, quien cayó el sábado 07 de noviembre en el operativo de inteligencia de la Policía Metropolitana de Bogotá, la Sipol, la Sijín y la Fiscalía.
El exmilitar se convirtió en enemigo del clan cuando a Tirso Meleán le capturaron en Texas, en febrero de 2019, por agentes antimafia de Estados Unidos. Parra intentó apropiarse del manejo de la banda, lo que lo convirtió en rival de sus otrora patrones.
En ese momento, adoptó el alias de Yeico Masacre y echó a andar un plan de exterminio contra los Meleán que ya ajusta más de 30 muertos en solo Colombia y otros más en Venezuela.
Las autoridades de inteligencia calculan que por lo menos 300 personas integran las dos bandas, que trasladaron su guerra a Colombia. Y en ese crudo enfrentamiento han caído de lado y lado.
Familiares asesinados
Entre los muertos figuran el padre, el hermano y uno de los pistoleros del propio “Yeico Masacre”. Tal como lo reveló un informe de El Tiempo, éstos resultaron asesinados en Ibagué, el 16 de febrero pasado.
Y en Bogotá, esos enfrentamientos han dejado 14 venezolanos muertos solo en la localidad de Ciudad Bolívar, en el sur de la capital.
Paralelo a su disputa, las bandas de venezolanos también han ido ganando terreno en los negocios ilícitos. Además de narcotráfico, “vacunan” a comerciantes y ahora se teme que incursionen en el secuestro, como lo hacen al otro lado de la frontera.
Por ahora, los enfrentamientos también incluyen la disputa por sicarios (incluidos colombianos), armas y una camioneta de alta gama, valorada en 180 millones de pesos, el equivalente a unos 22 kilos de coca de la que trafican estas bandas.
Circular roja de Interpol
En contra del exmilitar hay una circular roja, publicada el 27 de septiembre del año pasado y solicitada por Venezuela, por el delito de robo agravado, aunque también lo señalan de haber ordenado el homicidio de Benito Cobis, director de inteligencia y estrategias preventivas de la Guardia Nacional Bolivariana.
El 5 de octubre del 2018, Cobis resultó asesinado luego de que le lanzaran una granada de mano a su vehículo, que además terminó impactado en más de 100 oportunidades por disparos de fusil. Las imágenes del atroz crimen aparecieron luego en redes.
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