En un presunto enfrentamiento con funcionarios del Cicpc, murieron Brayan Alberto Quintero Hernández (27) y Domingo Camargo Rodríguez (31), en hecho ocurrido el viernes a las 11:30 a.m en una residencia del sector Piso 100, en Casalta II, parte alta de Catia.
Familiares de Quintero admitieron que el hombre había confrontado problemas con la policía por estar presuntamente implicado en delitos como robo, secuestro y homicidio. Su esposa está detenida y la familia ignora en qué oficina del Cicpc se encuentra.
Sin embargo, Belinda Camargo, madre de Domingo Camargo, aseguró que su hijo no era delincuente, era padre de dos niños, de 12 y 8 años y laboraba como chofer en la línea de autobuses de Los Magallanes de Catia.
Camargo estaba en la puerta de su vivienda, conversando con Brayan, cuando llegó la comisión policial y al notar que iban hacia ellos se metieron para la casa. Los funcionarios se dirigieron a Brayan, Domingo intentó salir por una ventana y le dispararon.
La madre asegura que Camargo llegó de su trabajo, iba a preparar el almuerzo para salir a buscar a uno de sus hijos en el colegio y se puso nervioso al ver a la policía. Los vecinos le contaron que escucharon sus gritos, implorando que no lo mataran, que el no tenía problemas con la justicia. Le dieron unos tiros y al caer lo remataron. Recibió cuatro en total.
Cuando los familiares de Camargo fueron al Cicpc a declarar vieron en la cartelera la fotografía de Brayan Quintero, entre los delincuentes más solicitados.
