Familiares de las víctimas de una de las mayores tragedias ferroviarias ocurridas en Argentina, la llamada "Tragedia de Once", homenajearon hoy a los 51 muertos y 700 heridos que dejó el accidente en una estación de Buenos Aires hace seis años y pidieron ver a los culpables entre rejas.
Con camisetas y pancartas en las manos en reclamo de justicia. Víctimas, familiares de fallecidos e integrantes de organizaciones sociales y de derechos humanos guardaron silencio mientras sonaban las sirenas a las 08:32 am hora local , momento exacto en el que un tren se empotró contra un andén de la transitada estación porteña de Once en febrero de 2012.
Allí, como cada año, recordaron la tragedia bajo 52 palomas de papel que cuelgan del techo en homenaje a las 51 personas que perdieron la vida aquel día, entre ellas, una mujer embarazada de seis meses que también perdió a su bebé.
"Hace seis años que este grupo de familiares sigue preso del dolor. Un dolor que se siente tan intenso por momentos, tan desagradable en otros. Es pena, es tristeza pura. Nuestras queridas víctimas nos enseñaron a estar atentos a la Justicia", señaló Mónica Pontiroli, madre de Tatiana, una de las fallecidas.
Por su parte, María Luján Rey, la madre de Lucas Menghini, otra de las víctimas mortales, señaló que este hecho marcó a fuego a Argentina y se convirtió en uno de los más dolorosos de su historia.
"Hoy venimos a reafirmar, con la convicción de siempre, que el dolor da paso a una lucha irrenunciable para ver tras las rejas a los culpables de esta masacre", aseveró en referencia al hecho de que las condenas aún no están firmes y los únicos presos son Julio de Vido, exministro de Planificación (2003-2015), y el exsecretario de Transporte Ricardo Jaime (2003-2008), pero por otras causas.
En diciembre de 2015, tras 134 audiencias que llevaron casi dos años de proceso, salió el histórico veredicto que condenó a Ricardo Jaime y al también exsecretario de Transporte Juan Pablo Schiavi (2008-2012) a seis y ocho años de cárcel, respectivamente, dentro de una primera causa para definir a los culpables del accidente.
El fallo determinó, además, penas de prisión para varios directivos de Trenes de Buenos Aires (TBA) -que tenía la concesión de la línea siniestrada- y el maquinista que conducía el tren, Marcos Córdoba.
Asimismo, estableció que quien fuera ministro de Planificación durante la Presidencia de Néstor Kirchner (2003-2007) y de Cristina Fernández (2007-2015) debía ser investigado.
De Vido fue procesado por estrago culposo y administración fraudulenta en mayo de 2015 y, el pasado octubre, fue citado por un tribunal pero se negó a declarar.
La Justicia considera que conocía las graves falencias del sistema ferroviario y no adoptó ninguna medida para solucionarlo.
Rey apuntó hoy que la corrupción generada desde su cartera causó el mayor desastre ferroviario de los últimos 5 años.
Con ella coincidió Paolo Menghini, el padre de Lucas, al apuntar que De Vido incumplió flagrantemente y a conciencia su responsabilidad.
Asimismo, denunció que durante 12 años de kirchnerismo se ha sembrado el Estado de amigos o personas que les deben favores, un poder que permanece intacto y que, desde aquel 22 de febrero de 2012, ha intentado comprar, acobardar y hacer dudar a los familiares, señaló.
En el acto, en el que también estuvo presente Nora Cortiñas, referente de las Madres de Plaza de Mayo, se reprodujo un mensaje de voz del cineasta Juan José Campanella, que cada año se solidariza con los familiares.
"Tenemos que lograr que se efectivicen las condenas, que las investigaciones lleguen hasta el fondo de todo, por una Justicia mejor, y que no abandonemos ni bajemos los brazos nunca", apuntó el director de "El secreto de sus ojos" (2009) antes de pedir que esta tragedia sea un antes y un después en la Justicia argentina.