El constructor de vehículos estadounidense Ford decidió, en un gesto publicitario, regalarle a una militante saudí el coche de sus sueños, después de que el reino anunciara que las mujeres podrán conducir, algo que tenían vetado.
«Nos gustaría regalarle el coche de sus sueños», indicó Ford Middle East en su cuenta oficial de Twitter, dirigiéndose a Sahar Nassif, quien había hecho campaña para que las mujeres saudíes pudieran ponerse al volante.
«Su Mustang la espera», dijo la marca estadounidense en un segundo tuit en el que incluía la foto de un Ford Mustang amarillo bajo la etiqueta #MustangSahar.
Sahar Nassif había asegurado que sentía debilidad por ese modelo en una entrevista justo después de que se publicara, el 26 de septiembre, el decreto real que retiraba la prohibición de conducir impuesta a las mujeres, a partir de junio de 2018.
Arabia Saudí, donde rige una versión rigurosa del islam, era el único Estado del mundo cuyas mujeres no podían conducir.
Las saudíes llevaban mucho tiempo reclamando este derecho y algunas fueron detenidas tras haber sido interceptadas al volante. Eran liberadas, únicamente, después de que sus tutores masculinos prometieran que no volverían a hacerlo.
La universidad Princess Nourah, una institución pública con más de 60.000 estudiantes en Riad y otras ciudades cercanas, fue la primera en anunciar, el domingo, que abrirá una autoescuela para mujeres.
Además de Ford, otros constructores automovilísticos, como Nissan y Chevrolet, «felicitaron» a las saudíes y les desearon la «bienvenida».



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