Sin derecho a la educación se encuentran al menos 8 mil niños venezolanos no pueden ver clases por el cierre de la frontera con Colombia, medida que tomó el gobernante Nicolás Maduro el pasado sábado 23 de febrero.
La ONG Fundaredes dijo que los afectados son escolares de los municipios Pedro María Ureña, Bolívar, Junín y Rafael Urdaneta, del estado Táchira, que ante las fallas del sistema educativo venezolano ven clases en el departamento Norte de Santander en Colombia.
El director general de Fundaredes, Javier Tarazona, denunció que con esta medida de cierre fronterizo “se vulneran varios de sus derechos, casos que son considerados graves en el derecho internacional”.
Explicó que junto a las organizaciones Fundación El Amparo y Proyecto 860 están documentando estos casos para presentar la violación de estos derechos ante el Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo, que están en el deber de garantizar los derechos de la infancia y la adolescencia.
Tarazona dijo que estas instancias deben “responder ante esta violación de los derechos humanos de los niños y adolescentes, así como ante tribunales del sistema de protección del niño, niña y adolescente de manera formal”.
Y agregó que “ya generamos contactos con la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (Cidh), y con la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (Corte IDH), para que se activen los mecanismos de protección y demás acciones necesarias”.
Cierre fronterizo con Colombia y Brasil
El cierre de las fronteras con Colombia y Brasil se produjo el 23 de febrero, día en el que el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, anunció que entraría la ayuda humanitaria al país desde los centros de acopio en estos dos países.
Sin embargo la orden de impedir su paso generó enfrentamientos, heridos y hasta víctimas en Bolívar, y más de 200 lesionados en Táchira, cuando las fuerzas de seguridad de Maduro reprimieron la entrada de los camiones con la ayuda.
Incluso la gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, reclamó la reapertura de la frontera, ya que muchos venezolanos acuden al municipio Villa del Rosario para comprar alimentos y medicinas.
Con información de Efecto Cocuyo