Tras el ataque a la 41 Brigada Blindada del Ejército en Naguanagua, la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) reafirmó este sábado su apego a los principios soberanos para la defensa del país «ante agentes pro golpistas», que apelan a herramientas como el terrorismo.
Sergio Rivero Marcano, comandante general de la GNB, exaltó la labor realizada por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana por contribuir con la paz de los venezolanos tras la captura de Yefferson García Dos Ramos y Juan Carlos Caguaripano, los autores materiales del asalto al Fuerte Paramacay.
Rivero Marcano precisó que Caguaripano perteneció a la GNB, quien demostró exiguos niveles éticos y morales, alto grado de indisciplina y deshonestidad. Así como también un desapego marcado en incisivo a la vida castrense y anegada de todos los militares venezolanos, causa que respondió a su expulsión en 2014.
El comandante rechazó esta acción criminal que desdice del honor y las virtudes profesionales arraigadas de la formación de militares de carrera, así como la campaña de manipulación mediatice iniciada también por el exoficial Javier Nieto Quintero imputado por sus acciones tras su participación activa en el entrenamiento de 150 paramilitares colombianos en el 2004, su participación en acciones desestabilizadoras en el 2007 en traición de la patria y por ende obligado también a separarse de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
Sostuvo que, estos actos terroristas tiene como objetivo contribuir con una falsa matriz de descontento militar para alimentar las pretensiones de algunos sectores de la oposición venezolana de continuar con las acciones violentas en el país.