Eran las 6:00 pm de un día largo de movilizaciones. Los manifestantes se concentraban pacíficamente en el distribuidor de El Trigal. El horror estaba a la vuelta de la esquina. Inesperadamente la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana irrumpieron en el lugar, disparando bombas lacrimógenas.
Mientras los protestantes corrían, los vecinos les gritaban improperios a los funcionarios. El edificio El Caribe, frente a la torre BOD, fue el escenario de una batalla entre un joven y un efectivo de la Policía Nacional Bolivariana. El muchacho ganó, pero los residentes de la zona no salieron ilesos: «Gas del bueno» fue lo que obtuvieron.
La gente se resguardaba en los apartamentos aledaños. La unión y solidaridad imperaba a pesar del miedo en los semblantes.
Los presentes aseguraron que pese a la represión seguirán en las calles hasta que el gobierno de Nicolás Maduro salga del poder. «El hambre es uno de los principales motivos para salir a protestar. Nos mantendremos firmes hasta que Maduro se vaya» afirmó uno de los manifestantes.
La Autopista del Este y el distribuidor de El Trigal quedaron despejados. Se desconoce si hubo algún detenido en estos hechos.
