Este fin de semana las autoridades estadounidenses comenzaron a enviar 2,9 millones de dosis de la vacuna desarrollada por Pfizer, aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, en inglés) el pasado viernes.
Hasta el momento, Pfizer ha acordado con EE.UU. el suministro de 100 millones de dosis de su suero durante lo que queda del año y los primeros meses de 2021, a cambio de mil 950 millones de dólares, y está negociando otros cien millones para el año que viene.
Pero para cumplir su objetivo, las autoridades cuentan con que en los próximos días la FDA dé también su consentimiento al uso de otra vacuna desarrollada por la farmacéutica Moderna y con que los sueros experimentales con los que trabajan las compañías Johnson & Johnson y AstraZeneca superen todas los ensayos y sean probadas en el primer trimestre del año que viene.
20 millones de vacunados antes de fin de año
Otros 30 millones recibirían la primera dosis de la vacuna, que necesita dos dosis para resultar efectiva, en enero, con el objetivo de conseguir para finales de marzo que 100 millones de estadounidenses estén inmunizados.
Hoy, en el primer día de distribución, está previsto que la vacuna llegue a 145 puntos en diferentes partes del país, que el martes se distribuida a otros 425 y el miércoles a otros 66 centros en un proceso que continuará a lo largo de las semanas.
La distribución está siendo dirigida por el general del Ejército Gustave F. Perna, responsable de la bautizada Operación Warp Speed y en la que participan las compañías de reparto UPS y FedEx.
«Hoy tenemos la esperanza en camino. Los suministros de una vacuna contra la COVID-19, segura y eficaz y autorizada por la FDA están llegando a sitios en todo Estados Unidos. Las vacunas comienzan hoy tan pronto como los trabajadores sanitarios estén preparados para empezar a administrarlas», dijo el secretario, que recordó que el número de muertos y hospitalizaciones están marcando cifras récord en muchos lugares del país.
Azar, que agradeció al presidente Donald Trump por su «visión audaz y su inquebrantable apoyo a la Operación Warp Speed», pidió a los estadounidenses que se mantengan en guardia mientras llega la vacuna.
«Mientras que nuestro país se acerca a la vacunación completa, tenemos que seguir tomando medidas para mantener seguros a nuestros seres queridos y a nuestra comunidad», subrayó el responsable de sanidad. EFE