El Gobierno de México renovó el bono catastrófico para sismos hasta el 2020 y con una cobertura de 260 millones de dólares, informó hoy la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
"La SHCP renovó el bono catastrófico para sismos, el cual tendrá una vigencia por dos años y brindará una cobertura hasta por 260 millones de dólares", indicó la institución en un comunicado.
Los recursos de la cobertura potencian el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), usado para dar atención a situaciones de emergencia y reconstrucción o restitución de los daños de desastres naturales en infraestructura pública federal o local y viviendas en situación de pobreza.
El bono tiene dos series: la primera cubre hasta 100 millones de dólares y se activará con sismos de intensidad moderada (desde magnitud 7,0 en el centro del país).
Y la segunda cubre hasta 160 millones de dólares y se activará a partir de sismos de magnitud 7,4 en el centro del país.
Con respecto a movimientos telúricos con epicentro en las costas del país, la cobertura tendrá activación a partir de una magnitud 7,9.
"Ambos bonos se adicionan, por lo que en caso de que se presente un sismo de gran intensidad, los montos máximos de recuperación podrán ascender hasta 260 millones de dólares", agregó el texto.
Al igual que en el resto de los bonos catastróficos contratados por el Gobierno federal, el pago de indemnizaciones del bono al Fonden se activará con base en los parámetros de intensidad, ubicación y profundidad del epicentro, verificados por una agencia internacional independiente, sin necesidad de requerir la valuación de daños para determinar el monto a indemnizar.
La renovación del bono catastrófico de México, por quinta ocasión, generó el interés y la participación de 33 inversionistas globales especializados en estas inversiones, incluyendo fondos de pensiones, fondos de inversión alternativa, reaseguradores y aseguradoras.
La colocación presentó una sobredemanda de 206 % al monto ofertado, lo cual favoreció una disminución en la prima de riesgo, logrando una prima ponderada total de 4,71 %.
La renovación se realizó de manera conjunta con los otros países de la Alianza del Pacífico: Chile, Colombia y Perú.
El bono catastrófico "Alianza del Pacífico" se diseñó en conjunto con los miembros de esta unión de países, y con el Banco Mundial como asesor técnico en el diseño del instrumento y como emisor de la transacción.
El instrumento conjunto fue emitido mediante la plataforma del Programa de Emisión de Deuda Global para emisión de Bonos, a cargo del Banco Mundial.