El presidente del Colegio de Enfermeras de Carabobo, Julio García, rechazó las acciones que ha emprendido el gobierno en contra de las dirigentes del gremio en Zulia y Aragua, por el solo hecho de denunciar las precarias condiciones de trabajo en las que se desarrollan las actividades de las enfermeras.
García calificó como injusto el procedimiento administrativo destitutorio que se le abrió a la presidenta del colegio en Aragua, Yésica Vidal, a quien además se le suspendió el salario.
El gremialista dijo que si bien es cierto el salario de los enfermeros es pírrico, no se justifica que por un capricho de orden gubernamental se sigan acosando a los profesionales de la enfermería.
García también se solidarizó con la presidenta del Colegio en el Zulia, Hania Salazar, quien fue citada por el Cicpc, y en estos momentos su condición es incierta.
“Queremos que estos dos procesos sean revocados, porque lejos de contribuir al establecimiento de un clima de paz, de derecho y de justicia, se complica cada vez más la situación y el diálogo social”, señaló.
El dirigente gremial insistió en que estas dos profesionales, solo han denunciado las precarias situaciones en que se labora, la falta de insumos y equipos en los hospitales, y por supuesto los bajos salarios que reciben.
Julio García subrayó que recientemente organismos internacionales como la OIT, han señalado en sus informes que la actividad del ejercicio gremial es de alto riesgo en Venezuela, por lo cual han recomendado a las autoridades gubernamentales, el cese de las medidas de amedrentamiento, instigación y estigmatización, en contra de los profesionales de la enfermería.
“Rechazamos lo que le está pasando a estas colegas, nos solidarizamos con ellas, y estamos abocados para que a través de las distintas fórmulas de reclamo, se les restituyan sus derechos gremiales y profesionales”, reiteró.
