Con un impacto de bala en la cabeza, las autoridades encontraron un cadáver en la quebrada La Zorquera, en sector de Zorca-San Joaquín, al norte de San Cristóbal, estado Táchira.
Señala la web del diario regional La Nación que voceros policiales manifestaron que el cuerpo sin vida resultó avistado por personas que recorrían la quebrada en busca de objetos que pudieron haber quedado en las márgenes, tras la crecida por las lluvias de la semana pasada. En un principio se creyó que era una victima más de las precipitaciones.
En el sector conocido como La Horqueta, los pobladores se percataron de que en la mitad de la quebrada, medio sumergido en el agua, se encontraba el cadáver de una persona del sexo masculino, por lo que de inmediato dieron aviso a funcionarios de la Policía de Táchira, destacados en Zorca. De inmediato se trasladaron y comprobaron que en efecto había una persona allí, que posiblemente había fallecido por inmersión.
Por ello, avisaron a los bomberos de San Cristóbal para el rescate, y a los detectives del Cicpc para el levantamiento respectivo.
No se trataba de un ahogado
Pronto se aclaró que no se trataba de una persona ahogada, por cuanto se podía observar en el fallecido lo que parecía un impacto de bala, a la altura de la cabeza, lo cual confirmaron los detectives de la Brigada Contra Homicidios, que se encargaron de trasladar el cuerpo a la morgue del Hospital Central para la correspondiente autopsia.
La víctima quedó identificada como José Humberto Díaz, de nacionalidad venezolana y 35 años de edad, conocido como Beto, quien se dedicaba a la venta de verduras y, de acuerdo con la información aportada por sus familiares, vivía en la zona de Pie de Cuesta.
El hombre estaba desaparecido desde la noche del pasado lunes, cuando salió de su residencia en Zorca-San Isidro para comprar comida, pero sin explicar a sus familiares hacia dónde se dirigía.
Posible venganza o ajuste de cuentas
Explicaron que el hombre salió a eso de las 8:00 de la noche y, desde ese momento, perdieron todo contacto y desconocían su suerte y paradero. Funcionarios policiales se abstuvieron de hacer comentarios sobre el caso, aunque trascendió que se maneja la tesis de la venganza o ajuste de cuentas, que lo pasaron buscando en algún vehículo y que llovía para el momento. En su teléfono estaría la clave del caso, pero el dispositivo se encuentra desaparecido.
Se presume que al hombre le dispararon en la parte alta de Zorca y lanzaron su cuerpo a la quebrada, para que le arrastrara la crecida, pero el agua sólo lo llevó hasta el cerro El Molinero, zona de La Horqueta, donde quedó atrapado en un banco de arena.
Con información de La Nación (Táchira).
