El barbero Ramón Alberto Quintero Mujica, de 66 años de edad, fue hallado muerto y en estado de descomposición en la habitación donde vivía alquilado en una pensión ubicada en la calle Cruz Verde, de Antímano, suroeste de Caracas.
Los dueños del inmueble tenían dos ó tres días sin ver a Quintero, y en vista de que la puerta permanecía cerrada y no se escuchaba ruido decidieron avisarle a un familiar.
Una sobrina acudió a la pensión y al abrir la puerta encontraron el cuerpo. Debido al avanzado estado de descomposición no le observaron lesiones externas y pensaron que pudo haber sufrido un infarto, pero en la autopsia verificaron que había muerto por asfixia mecánica.
De la habitación desaparecieron dos celulares, ropa y tarjetas bancarias del difunto, por lo que las autoridades presumen que fue víctima de robo.
Quintero vivía solo, anteriormente laboró en una empresa de vigilancia, luego se dedico a la barbería trabajando particularmente con clientes fijos y a domicilio. Le sobreviven dos hijos, que están en el exterior, uno en los Estados Unidos y otro en Ecuador.
Unas primas se encontraban ayer en la morgue haciendo los trámites legales para retirar el cadáver.