La opositora nicaragüense Nidia Lorena Barbosa Castillo, de 66 años y condenada a 11 años de prisión por delitos considerados como "traición a la patria", fue ingresada a la unidad de cuidados intensivos en un hospital, informó la Unidad de Defensa Jurídica (UDJ), un organismo defensor de los disidentes detenidos.
La presa política Nidia Barbosa se encuentra en UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) del hospital Japón, ubicado en la ciudad de Granada, 45 kilómetros al sureste de Managua, indicó la UDJ a través de sus redes sociales.
Dicha unidad aseguró que el director del Sistema Penitenciario de Granada, Ermel Fernández, "no permite ingreso a UCI" a la hija de la opositora, "alegando que tiene orden de no permitirlo, ni le brinda información precisa de su estado de salud".
Barbosa fue hospitalizada en noviembre pasado con padecimientos de la presión y del corazón, días después de haber sido encarcelada, según informó en su momento la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia de Nicaragua, a la que pertenece.
Nidia Barbosa está muy grave de salud y fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Japón. Las autoridades penitenciarias no permiten a su familia estar junto a ella ni le brindan información. Demandamos que comuniquen a su familia su estado real y sea puesta en libertad, señaló, por su lado, la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco en una declaración.
Temen lo peor
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) confirmó que la opositora se encuentra ingresada en el hospital, y demandó a las autoridades que permitan a su hija ver a su madre.
La directora para las Américas de Amnistía Internacional (AI), Erika Guevara Rojas, demandó en un mensaje información y protección a la integridad y la salud de la activista nicaragüense.
Exigimos libertad inmediata para nuestra integrante Nidia Barbosa. Su estado de salud es grave, abogó la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, que fue la contraparte del Ejecutivo en una mesa de negociación con la que se buscaba una salida pacífica a la crisis que vive Nicaragua desde abril de 2018.
Barbosa, integrante de la Alianza Cívica, fue capturada el 6 de noviembre pasado, un día antes de las elecciones generales de noviembre de 2021, en las que el presidente Daniel Ortega fue reelegido con sus principales contendientes en prisión.
En febrero pasado, el juez William Howard López, del Juzgado Distrito Penal de Juicios de Masaya, la condenó a 11 años de prisión por el delito de menoscabo a la integridad nacional, en modalidad de conspiración y propagación de noticias falsas.
Los opositores temen que Barbosa fallezca como ocurrió, en febrero pasado, con el histórico combatiente sandinista Hugo Torres, también acusado por "traición a la patria" y quien falleció a los 73 años bajo custodia policial a causa de una "enfermedad" aún no especificada por las autoridades.
Barbosa forma parte de un grupo de 68 nicaragüenses detenidos durante 2021 en el marco del contexto electoral, entre los que se encuentran líderes opositores, estudiantiles, campesinos, periodistas y profesionales independientes, incluyendo a siete disidentes que aspiraban a competir por la Presidencia.
Al menos 57 han sido condenados a penas entre 7 y 13 años de cárcel, de los cuales 9 se encuentran bajo arresto domiciliario.
El presidente Ortega ha tildado a los opositores encarcelados, juzgados y condenados de "traidores a la patria", "criminales" e "hijos de perra de los imperialistas yanquis".