Jugadores del Celta celebrando el tanto del empate frente al Barcelona. / Foto EFE

Un gol de Iago Aspas en el minuto 88 valió para que el Celta empatara 2-2 frente a un Barcelona que, pese a los dos goles marcados por Luis Suárez, ve cómo se le agotan sus opciones de ganar LaLiga.

El encuentro empezó con un ritmo de juego muy alto por parte de ambos equipos. El conjunto culé salió con ganas de meter presión al Madrid. Setién alineó un novedoso centro del campo con el tridente Rakitic – Puig – Arturo Vidal, mientras que en el ataque Messi y Suárez compartieron posiciones con Ansu Fati, que dejó a Griezmann en el banquillo.

Apenas seis minutos después del pitido inicial, llegó la primera opción para los visitantes. Un córner lanzado por Messi al primer palo fue rematado por Piqué, que vio cómo su remate de cabeza era repelido por el travesaño.

El Barcelona continuaba dominando en los primeros minutos a los mandos de Riqui Puig, que con sus 20 años está siendo una de las mejores noticias para los blaugranas desde la reanudación de la competición. El pequeño centrocampista español tomó los mandos del centro del campo para colaborar en la fase de creación junto a un activo Lionel Messi.

Fue precisamente Lionel el genio que frotó la lámpara para el primero de su equipo. En el minuto 20′, una falta en la frontal hizo temblar al equipo que dirige Óscar García, que, en su intento por evitar el peligro que supone Messi en los tiros libres, decidió poner a dos jugadores junto a cada palo, en la línea de gol, en una medida tanto novedosa como arriesgada.

Ante esta situación, todos los jugadores del Barcelona quedaban habilitados, lo que Messi aprovechó para, cuando nadie lo esperaba, asistir a un Suárez que no perdonó, marcando de cabeza su primer gol desde la reanudación de LaLiga.

Tras el gol de los culés, más que decaer, el Celta se creció. Un error de Ter Stergen en salida fue desaprovechado por Smolov, que optó por jugarse la individual teniendo a Aspas solo a su lado. Piqué corrigió a tiempo el primer susto para su equipo taponando el disparo del delantero ruso.

Dos minutos más tarde llegó otra ocasión para el conjunto gallego. Denis Suárez, ex jugador del Barcelona, filtró un gran pase en profundidad para Brais, que disparó frente a Ter Stergen, pero su remate fue desviado por el arquero alemán, primero, y por el palo, después.

Tras esos minutos de peligro celeste, el conjunto azulgrana intentó dominar el esférico, sabiendo los problemas que estaban teniendo para contener a los atacantes locales.

En el 40′, Messi tuvo una gran oportunidad que, en condiciones normales, no suele fallar. Se metió hasta el borde del área entre varios defensas locales y su típico disparo al segundo palo se fue desviado.

Tras el mediotiempo, los problemas de la defensa azulgrana se confirmaron. Bastaron cinco minutos para que el Celta empatara. Rakitic perdió el balón, permitiendo una contra que el equipo local no perdonó esta vez, con un Aspas que aprovechó para asistir a Smolov, quien marcó a placer. 1-1 y el miedo empezaba a entrar en el cuerpo de los culés.

Los locales movieron el banquillo, sacando a Okay, Brais Méndez y Smolov e ingresando al terreno de juego Bradaric, Rafinha y Nolito.

A pesar de que no dominaban como en el primer tiempo, el Barcelona logró ponerse nuevamente por delante en el marcador. Es lo que te da tener a dos jugadores de la categoría de Messi y Suárez, futbolistas que en un abrir y cerrar de ojos pueden meter en problemas a cualquier equipo.

El argentino asistió al uruguayo, que se giró sin tocar el balón para perfilarse y rematar con su zurda, poniendo el balón junto a la cepa del palo derecho de la portería defendida por Rubén. La conexión sudamericana volvía a dar frutos al Barcelona.

Se venía el último tramo del partido y el Celta adelantó sus líneas, aprovechando la calidad de Rafinha y Denis Suárez, ambos ex jugadores de los culés, en el centro del campo, junto a la amenaza que supone tener a Iago Aspas en el ataque.

Fue precisamente Aspas quien, en el minuto 88, aprovechó un tiro libre desde la frontal, tras una falta de Piqué sobre Rafinha, para anotar con un tiro raso por fuera de una barrera que pareció estar mal colocada.

Pudo incluso ganarlo el Celta en una contra en el tiempo de descuento. Sin embargo, Nolito, con todo a favor, definió justo hacia donde estaba ubicado Ter Stergen, que salvó a su equipo de la derrota.

Con este empate, el Barcelona alcanza las 69 unidades, con un punto más que el Real Madrid, que disputará el próximo domingo su partido de esta jornada frente al Espanyol y, de ganar, se quedarían como líderes en solitario de LaLiga Santander.

 

 

 

 

 




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.