Funcionarios del Instituto de Transporte y Tránsito Terrestre (INTT), estuvieron desplegados en diferentes estaciones de servicio del oeste y centro de la ciudad. En la bomba Zulia, ubicada en la avenida Libertador con calle 42, los funcionarios verificaban que los vehículos en proceso de abastecerse de combustible tuvieran el terminal de la cédula 3 y 4 que correspondía este martes.
Le exigimos a conductores el carnet de circulación, la cédula de identidad y revisamos los seriales de la placa, para que de esta manera se cumpla con el esquema de distribución que estableció el presidente de la República, mencionó un funcionario.
En la bomba Panamericana, ubicada en la misma dirección, también se les exigió a los transportistas enseñar el número de placas y documentos del vehículo. Este mismo procedimiento se les aplicó a los motorizados que desde la madrugada se encontraban esperando frente al Domo Bolivariano de la avenida Libertador.
Hay que destacar que los funcionarios de la Fuerza Armada Nacional, estuvieron custodiando algunas estaciones de servicio, incluyendo La Tinaja ubicada frente al Cementerio Nuevo. Ellos estuvieron en vigilia desde la noche el lunes cuando descargaron combustible.
Empresas sufren por escasez
Dos colas se hicieron en la bomba San Luis, de la Zona Industrial II. En una, esperaban montacargas y trabajadores de empresas que llevaban sus plantas eléctricas que funcionan con gasolina. Al igual que los conductores, ellos tuvieron que amanecer en la cola.
El método de pago en varias estaciones de servicio fue el biopago, este para cobrar la gasolina subsidiada y llevar el control de los carros. Cada isla de la gasolinera contaba con su respectivo sistema biométrico para agilizar el tiempo en cola de las personas y hacer menos larga la espera.
Lee la nota completa en La Prensa
