El director de FundaRedes, Javier Tarazona, denunció este jueves en entrevista a Punto de Corte, que los inmigrantes venezolanos que se están regresando de Colombia a su país, por las trochas en los estados fronterizos, no están recibiendo la atención que dice dar el régimen de Nicolás Maduro.
«A estos ciudadanos, alertó, no a todas las personas les están practicando la prueba para diagnosticar el COVID-19″, afirmó.
“Venezuela no tiene un verdadero control sanitario, producto de la situación humanitaria compleja en salud. Ciertamente, no se están aplicando las condiciones de una contingencia que garantiza la integridad y la vida de quienes están regresando y de quienes estamos acá en territorio venezolano».
«Es decir, que la improvisación y la arbitrariedad con la que han venido actuando en las últimas horas, está generando bastante dificultades para las personas que están regresando, quienes están siendo ubicados en la propia terminal de pasajeros o en algunos planteles educativos, donde ni siquiera agua potable hay, no se les garantiza los alimentos, no se les garantiza ni siquiera un lugar óptimo para el descanso”, afirmó el Tarazona.
Asimismo, aseguró que de acuerdo al registro que llevan desde FundaRedes, entre 2.500 a 3.000 personas que están regresando de Colombia a Venezuela y ratificó que no todas están recibiendo el control sanitario, ante la pandemia del COVID-19.
“Tenemos un registro interno de FundaRedes a través de nuestros voluntarios que están en el terreno, pero realmente no hay forma de aplicarle la prueba (del Covid-19) a todas las personas que están ingresando, porque no lo han hecho y esa es una de las cosas que más preocupa, porque pudiéramos estar, en un solo lugar, teniendo personas que pueden estar contagiadas y otras personas que pueden estar completamente sanas”, enfatizó.
En relación a las operaciones de los grupos paramilitares en Venezuela, el director de FundaRedes señaló que “ciertamente están activando grupos guerrilleros. En el caso del Ejército de Liberación Nacional, uno de los frentes ya tomó una instalación educativa para forzar la colocación o el uso de esta instalación como refugio”, ratificó.
Ante esta situación, Tarazona puso de ejemplo el Colegio Santa Mariana de Jesús, en Capacho, estado Táchira, al reafirmar la denuncia de que grupos armados del ELN, llegan portando armas largas en vehículos, “intimidando a la población para hacer uso de dichas instalaciones”.