El ministro de Exteriores, Jorge Arreaza, confió hoy en que de la mesa de diálogo entre el Gobierno y la oposición salga un acuerdo de convivencia que respete la ley y acabe definitivamente con la violencia.
Arreaza, que participa hoy en La Habana en el XVI Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (Alba), precisó a Efe que las conversaciones van marchando y señaló que «ojalá la oposición venezolana tenga la voluntad de dialogar», porque se encuentra «muy dividida».
La voluntad del Gobierno de Venezuela es absoluta con el diálogo. Es un compromiso, una obligación y ojalá que siga asistiendo la delegación de la oposición, señaló.
El titular de Exteriores venezolano agradeció al presidente dominicano Danilo Medina, al expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y a los países acompañantes por facilitar el proceso de negociación que busca solucionar la grave crisis social del país.
«Ojalá que podamos garantizar en ese espacio un acuerdo de convivencia donde se respete la ley, donde la violencia política quede fuera del juego», expresó Arreaza, que rechazó el premio Sájarov a la Libertad de Conciencia concedido por la Unión Europea a la oposición venezolana.
Subrayó que es natural que la UE premie a los que defienden la violencia porque el sistema capitalista no va a premiar a los que defienden la paz, a los que quieren el diálogo.
Jorge Arreaza participa en La Habana en el XVI Consejo Político de la Alba, un mecanismo que hoy cumple 13 años de fundado por los fallecidos expresidentes de Venezuela Hugo Chávez y de Cuba Fidel Castro.
«Es un orgullo y un privilegio histórico poder estar aquí trece años después y ver una Alianza mucho más fuerte y que ahora es núcleo de otros procesos de integración como la Celac y la Unasur», agregó.
Agradeció el apoyo y la solidaridad internacional en este año de «duras batallas» y mencionó como desafíos para el 2018 la necesidad de reactivar los espacios económicos del Alba y cerrar las filas en torno a Venezuela y sus próximas elecciones presidenciales.
«Deben ser los venezolanos los que decidan su futuro con su sistema electoral y que no haya injerencias como ha ocurrido en Honduras, donde a dos semanas y más de sus elecciones todavía no se sabe cuál es el verdadero resultado», agregó.
