El campo Andrés Galarraga del Complejo de Desarrollo Deportivo de Empresas Polar en el municipio San Joaquín fue el escenario dónde José Altuve volvió a ser niño. El estelar grandeliga dictó una clínica de béisbol a 40 infantes y no evitó recordar los tiempos cuando inició sus pasos en el deporte que lo llevó a la gloria.
«Esos chamos me hicieron regresar a cuándo tenía 10 años y quería ser como Omar Vizquel o Miguel Cabrera» reconoció el pelotero venezolano al que hoy toman como referencia innumerables menores de edad no sólo en el país, sino en el resto de territorios donde la pelota tiene algún espacio de interés.
Altuve, lejos de demostrar ansiedad ante el anuncio del Jugador Más Valioso de la Liga Americana este jueves donde es uno de los nominados junto a José Ramírez y Aaron Judge, se limitó a impartir sus conocimientos al equipo Navegantes de Criollitos de Venezuela en las categorías pre infantil e infantil y disfrutar junto a ellos la experiencia de practicar los fundamentos básicos de bateo y fildeo.
El segunda base de los Astros de Houston viene de conquistar el máximo logro colectivo en el béisbol, como lo es la obtención de la Serie Mundial a expensas de los tradicionales Dodgers de Los Ángeles en siete juegos.
El nativo de Maracay fue protagonista en ese último out de los siderales que culminaron la gesta en la gran urbe californiana. Tomó un rolling como lo hacía con su padre Carlos hace algunos años; aunque aclaró que con menos frecuencia que las prácticas con el madero, lanzó a Yuli Gurriel y completó el último bateador fuera del año que sentenció el primer anillo para la organización texana.
El tres veces ganador del título de bateo en el joven circuito demostró su talento con el baile en la actividad, de la misma manera como en las redes sociales se hizo viral aunque en esta oportunidad acompañado de pequeños de los Institutos de Educación Especial en la zona.
Altuve ya no quiere saber nada del MVP en las Ligas Mayores hasta el día del anuncio, solo desea suerte a todos los candidatos y reconoce las virtudes de cada quién. Él sabe que en Venezuela ya lo es desde hace algún tiempo para todos aquellos que admiran su trabajo dentro y fuera del terreno.
