En una parada de autobuses se encontraba Luis Enrique Castillo Esada de 27 años, venía de una reunión organizada por los amigos de su novia y esperaba que llegase la unidad que los llevaría hasta Tocuyito para volver a casa. Nunca abordó el vehículo.
Un disparo por la parte de atrás del cuerpo le ocasionó la muerte, en la parada del sector Ruiz Pineda, de la parroquia Miguel Peña.
Se comenta que quizás intentaron robar al joven y este se opuso al hecho, por lo que pudo haber huido y en el intento recibir los impactos.