A Luis Alexander Terán Capriles (18) lo tirotearon para robarle la moto que conducía, el miércoles al mediodía, en el trayecto entre Santa Teresa y Ocumare del Tuy, estado Miranda, cuando regresaba de visitar a su abuela y se dirigía a la casa de su madre, con quien vivía.
Su hermana Elvia Terán contó que un automovilista se apiadó de él y lo llevó al hospital de Ocumare del Tuy, de donde Luis Alexander “nos llamó por teléfono y nos avisó lo que le había pasado”. Allí no lo atendieron por falta de recursos, pero llegó su hermano y logró trasladarlo al cuartel de bomberos de Charallave, donde le prestaron primeros auxilios y le hicieron un drenaje antes de llevarlo al hospital Domingo Luciani de El Llanito.
Una doctora se vino con él en la ambulancia para Caracas, pero había cola en la autopista, Luis Alexander se quejaba y decía que iba a morir, sufrió tres paros respiratorios y a las 7 de la noche, cuando lo ingresaron al centro asistencial estaba muerto.
El joven manejaba una moto prestada cuando le dispararon por la espalda, le robaron la moto y lo dejaron abandonado en la vía pública. Los tiros le perforaron los pulmones y le salieron por el pecho. Terán trabajaba como ayudante de camión con su suegro vendiendo frutas.