El papa Francisco ha asegurado hoy que san Juan Pablo II resultó un regalo para la Iglesia y para Polonia, su país de origen, en un vídeo grabado con motivo del centenario del nacimiento de Karol Wojtyla.
“Su peregrinación terrenal, que comenzó el 18 de mayo de 1920 en Wadowice y terminó hace 15 años en Roma, estuvo marcada por una pasión por la vida y una fascinación por el misterio de Dios, del mundo y del hombre”, destacó Francisco en italiano.
El pontífice señaló que Wojtyla se convirtió en «un gran hombre de misericordia» que «comprendió la especificidad y la belleza de la vocación de mujeres y hombres, entendió las necesidades de los niños, jóvenes y adultos, considerando también las condiciones culturales y sociales».
Juan Pablo II resultó un punto referencial
Y que puso especial atención en el amor y en el cuidado de la familia, hasta el punto de que «su enseñanza representa un punto de referencia» para encontrar soluciones ante las «dificultades y desafíos que enfrentan las familias hoy en día».
Francisco finalmente recordó que Karol Wojtyla «sufrió la pérdida de su madre, hermano y padre cuando era niño», «experimentó las atrocidades del nazismo, que le quitó muchos amigos» cuando era estudiante, y «después de la guerra, como sacerdote y obispo, tuvo que enfrentarse al comunismo ateo». EFE