Abatido “el Catire” en enfrentamiento con la Policía de Carabobo en Urama
Foto referencial: Cortesía (Policía de Carabobo)

Muchos jubilados y pensionados de la Policía de Carabobo prestaron hasta 30 años de servicio y ahora se encuentran desprotegidos. Su salario es de apenas 130 bolívares o lo que es igual a $5.2 mensual, en un país donde la canasta básica (para una familia de cinco miembros) de ubicó en enero de 2023 en 486,87 dólares, según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM).  La situación de los activos no puede calificarse de buena.

Además del bajo sueldo, que solo alcanzaría para comprar medio pollo, los jubilados no cuentan con seguro HCM ni beneficios laborales. “Hay funcionarios que se están muriendo en sus casas de mengua por falta de ayuda del gobierno. Ganamos ciento treinta bolívares mensuales. Nos estamos muriendo de mengua y nuestras familias también», dijo uno de los afectados.

Los funcionarios policiales entrevistados, en un alto porcentaje son personas de edad avanzada que no puede realizar una actividad extra que les permita generar otros ingresos para sobrevivir.

Muchos enfrentan innumerables carencias y están socialmente desprotegidos, pues no cuentan con servicios funerarios y los míseros salarios no les permiten cubrir alimentación y medicinas de ellos, mucho menos de sus familias.

En cuanto a los activos, la situación no es diferente. Con los bajos sueldos que perciben, pese a la enorme responsabilidad sobre sus hombros, deben hacer frente a gastos como uniformes y, en algunos casos hasta el mantenimiento de vehículos. Carecen de salarios dignos, viviendas seguras y mucho menos pólizas de salud ajustadas al riesgo que enfrentan.

Bajo condición de anonimato, los funcionarios detallaron que tampoco cuentan con municiones suficientes ni armamentos modernos. Muchas veces el hampa los supera en calidad de armas y en cantidad de balas, cuya procedencia se desconoce.

Según el último aumento salarial, que entró en vigencia el 16 de marzo de 2022, un comisionado jefe (máxima jerarquía policial) gana 946.34 bolívares (37.89 dólares) y un oficial (la jerarquía más baja) 900.65 bolívares (36.02 dólares), es decir, apenas un dólar con 82 de diferencia entre una jerarquía y otra. 

La tabla salarial de los funcionarios policiales es la siguiente:

Comisionado (A) Jefe: Bs. 946.34 (37.84 dólares)
Comisionado Uno. 944.17 (37.76 Dólares.)
Comisionado Agregado: Bs. 936,92 (37.47 Dólares)
Supervisor Jefe: Bs. 930,08 (37.20 Dólares)
Supervisor Agregado: Bs. 924,20 (36.96 Dólares)
Supervisor: Bs. 916.20 (36.64 Dólares)
Oficial Jefe (A): Bs. 909.16 (36.36 Dólares)
Oficial Agregado: Bs. 904.64 (36.18 dólares)
Oficial: Bs. 900.65 (36.02 Dólares)

Los montos son insuficientes para llevar una vida digna y acorde al trabajo que desempeñan. Esos sueldos violan flagrantemente el artículo 91 de la Constitución de Venezuela, que garantiza a los trabajadores un ingreso que les permita vivir con dignidad y cubrir para sí y su familia las necesidades básicas, materiales, sociales e intelectuales. Los funcionarios exigen que el Reglamento de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre) se ajuste a este articulado.




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