La Feria Internacional del Libro de La Habana, el mayor evento cultural en Cuba, regresa desde este miércoles tras dos años de pausa a causa de la pandemia con México como invitado especial.
Con participantes de 32 países, la trigésima edición de la feria se desarrollará hasta el 30 de abril, tanto en su tradicional espacio en la antigua fortaleza capitalina de San Carlos de La Cabaña como en otras 18 subsedes, entre ellas el Palacio Tecnológico de la Finca de Los Monos, la Feria Agropecuaria de Boyeros y el Pabellón Cuba.
Los organizadores de esta fiesta de los libros han anunciado para su retorno la presencia de una delegación de representantes de la cultura mexicana entre los 276 invitados extranjeros en los que figuran escritores, editores, distribuidores, libreros y otros especialistas del sector.
Los cubanos podrán encontrar 900 novedades editoriales, más de 4.000 títulos, cuatro millones de ejemplares de diversas materias y 1.000 libros electrónicos en la oferta prevista para la comercialización.
Esta vez, antes de emprender su recorrido por otras provincias de la isla, la feria recorrerá del 27 al 30 de abril los 15 municipios de la capital para visitar los barrios, entregar donaciones, realizar intercambios con autores y ventas de libros.
Luego «va a viajar por todo el país», aseguró el presidente del Instituto Cubano del Libro (ICL), Juan Rodríguez.
El centro histórico de la capital también será escenario del programa artístico y profesional de la feria, en salas de añejos como los palacios del Segundo Cabo y de los Capitanes Generales, y el Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana.
En esa zona, la Casa Víctor Hugo estará dedicada a la promoción de publicaciones seriadas y medios digitales, mientras la Casa Benito Juárez acogerá actividades de la delegación de México.
SIN LÍMITES DE AFORO, PERO CON MEDIDAS SANITARIAS
Rodríguez explicó que el evento pretende ser «multifuncional y multiespacial» y tener en cuenta durante su desarrollo los protocolos establecidos para la COVID-19, porque aún está presente la pandemia.
La incidencia de la COVID ha caído en Cuba en las últimas semanas, lo que ha dado lugar a la relajación de ciertas medidas para el enfrentamiento de la pandemia y la reactivación de actividades culturales con público, suspendidas desde principios de 2020.
El presidente del ICLE agregó que está previsto la convivencia de las distintas manifestaciones culturales y las presentaciones de libros en espacios físicos y virtuales, con el fin de evitar aglomeraciones.
MÉXICO, «INVITADO DE HONOR»
México será el país «invitado de honor», el primero que repite en este evento cultural, en el que ya estuvo con esa condición en 1998.
La presencia destacada de México se producirá poco antes de la próxima visita a Cuba de su presidente, Andrés Manuel López Obrador, prevista para mayo.
La delegación de esa nación en la feria incluirá una veintena de escritores, junto a artistas que traerán su música, representaciones de teatro, exposiciones, audiovisuales y bailes tradicionales, según informó el Instituto Cubano del Libro.
Entre los autores que viajarán en la delegación se encuentran Francisco (Paco) Ignacio Taibo II, Mario Bellatín, Natalia Toledo y Laura Beatriz Moreno.
La música y danzas tradicionales de la nación azteca subirán el próximo jueves 21 al escenario de la sala Avellaneda del Teatro Nacional durante una gala cultural.
El buque «Huasteco», de la Secretaría de Marina mexicana, trajo al puerto de La Habana en enero pasado un cargamento de 26.000 libros, muchos de los cuales serán donados a instituciones cubanas.
Además el Fondo de Cultura Económica mexicano abrirá una librería en una céntrica zona de La Habana para que los lectores cubanos tengan acceso a las obras y los autores para que quede como «símbolo» de la amistad entre ambas naciones, informó la embajada del país norteamericano.
Además, en esta edición se homenajeará a los intelectuales cubanos Alberto Prieto y Luis Álvarez, premios nacionales de Literatura y Ciencias Sociales y Humanísticas.
También se recordará el 120 aniversario del natalicio del poeta nacional Nicolás Guillén (1902-1989), los centenarios de los también poetas fallecidos Carilda Oliver Labra y Jesús Orta Ruiz, y los 140 años de la primera novela costumbrista cubana, la «Cecilia Valdés», de Cirilo Villaverde.
