La presidenta de la Academia Española de Cine, Yvonne Blake, la primera en pisar la alfombra roja de la IV Gala de los Premios Platino en honor este año al actor Edward James Olmos, en la Caja Mágica de Madrid, dio que estos galardones iberoamericanos «han alcanzado ya la categoría de los Óscar».
La alfombra roja comenzó unos minutos antes de lo previsto, sobre las 18.25 hora local (16.00 GMT), cuando hicieron su aparición la presidenta de la Academia, seguida de Antonio Velázquez; Pepón Nieto, Ingrid García Jonsson y la realizadora chilena Vivienne Berry, nominada al Platino al Mejor Documental por «Atrapados en Japón».
Venezolanos en la alfombra de los Platino
La bandera de Venezuela se coló hoy en el desfile de los IV Premios Platino, de la mano del actor y director Miguel Ferrari, que posó muy sonriente con la enseña colocada boca abajo, un «acto de rebeldía» para llamar la atención sobre «el terrible momento que vive» su país.
«Mis compatriotas están viviendo un momento muy duro, muy crucial para nuestros destinos, para nuestro futuro. Llevamos 113 días en emergencia con una protesta pacífica para exigir nuestros derechos porque se ha roto el hilo constitucional», explicó Ferrari a Efe.
«Aunque en nuestro país ha habido un golpe de estado, es loable porque hemos perdido el miedo y la gente se ha volcado en las calles», agregó el realizador.
En cuanto a mostrar la bandera al revés, precisó que «es un símbolo para llamar la atención. Era mi obligación hacerlo en este foro con millones de ojos viéndolo».
Otra actriz venezolana que mostró la bandera invertida al llegar a los premios fue Arlette Torres mostrado su orgullo de ser venezolana invertida, y en solidaridad con la crisis de su país.
Tanto González como Ferrari y Torres acuden como invitados a los Platino, unos premios que están en camino de convertirse «en el Óscar latino», en palabras del realizador de «Azul y no tan rosa» (2012), con la que se llevó el Goya a la mejor película iberoamericana.