Rostros cansados esconden la preocupación por conseguir el dinero para medicamentos, insumos, traslados y exámenes de pacientes que estén hospitalizados, en el estado Lara.
Aunque algunos estén pocos días en un centro de salud, los gastos alcanzan cifras inimaginables y una odisea que amerita tener a la mano desde gasa, jeringas o cualquier medicina.
Familiares hablan de hasta 10 millones de bolívares por una caja de antihipertensivo, 180 dólares por una tomografía y cada pañal de adultos en 2,5. La desesperación los lleva a buscar la colaboración de parientes, sacrificar bienes, realizar vendimias y tener la dicha de una remesa de allegados en el exterior, reseñó La Prensa de Lara.
Marisol Rodríguez, con voz entrecortada, se lamenta ante la necesidad de conseguir 180 dólares, equivalente a más de 320 millones de bolívares para la tomografía de su mamá María, quien a sus 85 años sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) y está recluida desde el 13 de enero en el Antonio María Pineda.
Señala que los costos se incrementan con los traslados en ambulancias privadas, al punto de lograr una rebaja «chillando» de 30 a 70 dólares.
Otro caso es Omar Rodríguez, quien es hijo único y su padre Gilson de 47 años, sufrió una aneurisma cerebral. Está internado desde el 17 de enero y cuenta que puede pasar días sin probar alimentos, pues su familia es de Cubiro.
A veces puedo comer una arepa al día, que regalan los cristianos, indica mientras agradece a la caridad del dueño del cafetín al permitirle bañarse.
El presupuesto familiar quedó corto, aún con cierto apoyo de autoridades rurales de salud. Amigos del pueblo organizan vendimias, venden combos de auyama, papa, zanahoria y ocumo por un dólar para aportar a los necesitados.
Con información de La Prensa de Lara
