Comprar el gas doméstico se ha convertido en una tragedia para algunas familias, sobre todo para las que tienen bombonas de 43 kilos, debido a que las empresas del ramo simplemente no las distribuyen.
Irma de Pandares, residente de la urbanización Michelena, es una de las víctimas de la situación. Según narró, la última vez que pidió el servicio fue en los primeros días de este año. Fue a La Quizanda, donde queda la empresa Tropiven y se anotó en la lista de los que requerían las bombonas.
De eso ya han pasado diez meses y sigue esperando, a pesar de que ha vuelto varias veces a la empresa y se ha vuelto a anotar. Todo este tiempo ha estado preparando su comida en cocinas eléctricas, lo cual le resulta bastante incómodo, sobre todo cuando se va la luz.
Pandares sostiene que en la Michelena los vecinos tienen que cazar cuando pasan los camiones, para rogarle al chofer que les deje las bombonas. Por lo general, siempre tienen una excusa para no hacerlo, aunque algunos se han dado cuenta que el cilindro se les deja a quienes “colaboren” con 20 mil bolívares.
Algo similar le ocurre a Nancy Bejarano en la urbanización El Trigal. De acuerdo a lo narrado su último pedido se lo llevaron en diciembre de 2016. En esa oportunidad le vendieron dos bombonas por seis mil bolívares, a pesar de que el precio establecido es de 600.
Bejarano confesó que realmente no le importó mucho pagar demás, porque necesitaba el gas con urgencia. En meses posteriores los pedidos nunca fueron atendidos, por lo que con la ayuda de un vecino, llevó la bombona en una camioneta hasta La Quizanda, donde le vendieron una llena. Sin embargo esta práctica quedó prohibida.
Estos días se ha visto obligada a preparar sus alimentos en una pequeña cocina eléctrica, que la tiene al borde del desespero, porque cuando está listo el arroz, ya la carne está fría y viceversa.
Brigida Aponte de Agua Blanca señaló que en el edificio donde viven han tenido hasta semana sin gas, porque simplemente no llevan el producto. Ahora descubrieron que si entre todos los vecinos recogen una colaboración de 20 mil bolívares para el camionero, de inmediato le llevan el gas.
En algunas barriadas del sur de Valencia, el servicio se recibe con regularidad, por cuanto se canaliza a través del consejo comunal.
