El número de vehículos nuevos vendidos en Brasil en el primer semestre fue de 1.019.400 unidades, un salto del 3,65 % en comparación con el mismo período del año pasado, informó hoy la patronal de los distribuidores de automóviles.
El resultado, que incluye automóviles particulares, utilitarios, camiones y autobuses, es el primero positivo para el primer semestre desde 2013, según las cifras de matrículas nuevas de la Federación Nacional de Distribuidores de Vehículos (Fenabrave).
Los datos reflejan la recuperación del sector automotor, uno de los más castigados por la recesión en que se hundió la economía brasileña en los dos últimos años y de la que el país comenzó a recuperarse en los primeros meses de 2017 con un avance del 1,0 % en el primer trimestre de este año.
En 2016, la industria automotriz brasileña registró una disminución del 11,2 % en la producción y de 20,19 % en las ventas.
Tales caídas fueron atribuidas a la recesión en Brasil, cuya economía se contrajo 3,8 % en 2015, su peor resultado en 25 años, y un 3,6 % en 2016, con lo que encadenó dos años seguidos de crecimiento negativo, algo que no ocurría desde la década de 1930.
De acuerdo con Fenabrave, el balance de junio fue prácticamente el mismo de mayo, con 194.900 vehículos nuevos vendidos, una cantidad que representó un avance del 13,5 % en la comparación con el sexto mes de 2016.
El avance fue sustentado por el segmento de automóviles y utilitarios leves, que registraron una subida del 4,25 % en el primer semestre y compensaron la caída del 13,5 %, en la misma comparación, de los vehículos pesados, como autobuses y camiones.
