La excandidata a la gobernación de Delta Amacuro, Larissa González denunció que los electores, miembros de mesa y testigos fueron «víctimas» de vejaciones y abusos de poder por parte de funcionarios del Plan República, durante el proceso de las regionales celebrado el pasado domingo 15 de octubre. El árbitro electoral cometió un fraude continuado sin precedentes contra el pueblo deltano.
González dijo que fueron los militares quienes arrebataron a los ciudadanos la posibilidad de cambio y de igualdad. Igualmente González precisó que los municipios Pedrenales y Casacoima, el comportamiento de los electores no coincide con los últimos procesos comiciales, ni mucho menos con los números que se manejaban.
Insistió en su acusación que el fraude fue continuado, se utilizaron los recursos del Estado, hubo irregularidades con el voto asistido a los indígenas; los empleados públicos votaron con el carnet de la patria, hubo sufragio múltiple. Se usó las bolsas del Clapp como chantaje para comprar votos en los propios centros de votación, y lo más grave impidieron la presencia de testigos, y de esta manera el régimen madurista obtuvo la victoria fraudulenta este 15 de octubre».
La dirigente acusó directamente al diputado Amalio Heredia de dirigir atrocidades contra la etnia Waraos a quienes se les violaron sus derechos políticos en el municipio San Francisco de Guayo. Advirtió que continuará en la lucha hasta lograr la libertad porque nos debemos a un pueblo que no se humilla ni se resigna a seguir sumergido en la miseria.
