Foto Cortesía

Este martes 26 de diciembre se registro una larga cola de vecinos de La Grita en el estado Táchira para abastecerse de gas domésticos.

En los últimos días los reclamos por este producto se han hecho sentir en estado como Lara, Mérida, Trujillo, Vargas, Aragua. Portuguesa y Carabobo, entre otros.

Desde de la madrugada comenzó a formarse la cola.(Foto Cortesía)

El problema de la escasez de gas doméstico no es nada nuevo. Venezolanos de casi todas las regiones del país llevan años reclamando mejoras para este servicio público básico en cualquier hogar.

Pero con el paso del tiempo en vez de ver soluciones lo que hemos visto es que cada día se complica más la situación. La gravedad del asunto a llegado a un punto en que los usuarios no prestan mayor atención al precio regulado establecido por el Gobierno, que no se cumple desde hace mucho tiempo porque la necesidad los obliga a pagar lo que sea.

Las personas necesitan el gas. No son pocas las que han tenido que auxiliarse con leña para poder preparar sus comidas pero cada día se hace más difícil. Hemos visto grupos de vecinos correr detrás de un camión de distribución de bombonas para suplicar que les vendan el combustible al precio que consideren conveniente los conductores.

Pero lo que resulta más fuerte es observar las largas colas de hombres y mujeres de todas las edades esperando que les vendan una bombonita de gas. Algunos madrugan y lograr el objetivo pero muchos otros tienen que regresar a sus casas sin el producto.

LAS CAUSAS DEL PROBLEMA  

Desde 2008, el entonces presidente Hugo Chávez, inició una política de expropiación de las empresas del sector y comenzaron las fallas. En los cuatro años siguientes, seis de los siete llenaderos pasaron a manos del Estado y en 2012 se centralizó la labor en una única planta y la crisis recrudeció, alertó en declaraciones a El Carabobeño Adrián Martínez, extrabajador de Pdvsa gas comunal, el pasado mes de noviembre.

Desde 2008, el entonces presidente Hugo Chávez, inició una política de expropiación de las empresas del sector y comenzaron las fallas.(Foto Archivo El Carabobeño)

En ese momento se crearon las rutas comunales de producción social que serían las encargadas de la distribución del gas domestico a precio justo. “Eso implicó que se eliminaran los estanteros que existían en las comunidades para la venta del producto y se instalara un solo punto por barrio con espacio para 50 cilindros de 10 kilos. Eso era insuficiente para la demanda”.

Fue un proyecto que fracasó y el sistema cambió a las citas programadas. “Los clientes llamaban a los llenaderos para saber cuándo podían ir con sus bombonas, dejarlas y buscarlas al día siguiente”. Se hacía así por el déficit de cilindros que aún persiste. Por cada planta debe haber 10 mil bombonas, y en conjunto no llegan ni a tres mil.

Martínez explicó que los cilindros tienen una vida útil de siete años que es cuando se le realiza la prueba hidroestátitica de inyección de presión y agua para saber si aguantan. “Y la mayoría de las que están en uso ya vencieron ese tiempo y se corre el riesgo de explosión”. Detalló que el problema es que no se produce el acero suficiente en el país para la fabricación de unidades nuevas ni la reparación de las viejas.

Las fallas productivas también han sido determinantes. Antes de la crisis, eran alrededor de 60 gandolas diarias las que subían cargadas desde El Palito a las plantas de llenado. “Ahora si llegan 15 son muchas”. En ocasiones no hay inventario en Puerto Cabello y los conductores deben ir hasta Guatire y Cardón para poder abastecer al centro del país.

A esta fecha 26 de diciembre de 2017 la escasez se mantiene.

 

 

 

 

 

 




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.