LeBron James y Anthony Davis lideraron a Los Angeles Lakers para vencer a los Houston Rockets (117-109) e igualar la serie 1-1. El partido estuvo marcado por dos fases totalmente distintas. Como el día y la noche, los de oro y púrpura mostraron su mejor y su peor cara en el mismo encuentro, pero la fuerza y determinación de ‘The King’ y ‘AD’ deniveló la balanza hacia el lado de los angelinos.
James, a sus 35 primaveras, continúa demostrando temporada tras temporada que sigue más vigente que nunca. Rozó el triple doble con 28 puntos, 11 rebotes y nueve asistencias. Aunque, más allá de números, su actuación en el último cuarto fue determinante, con grandes jugadas defensivas y puntos que pusieron tierra de por medio entre ambas franquicias.
Por su parte, Davis fue una vez más el acompañante perfecto para LeBron, confirmándose juntos como una de las parejas más letales de toda la liga. Su juego en la pintura, aprovechando su altura ante los defensas de los Rockets, fue clave para sacar ventaja. Anotó 34 puntos, capturó 10 rebotes y repartió cuatro asistencias.
Ambos tienen el segundo mejor porcentaje de victorias cuando un dúo anota más de 60 puntos en la historia de la NBA, con un .941%. Mientras que la primera pareja con mayor porcentaje fue la conformada por Kobe Bryant y Shaquille O’Neal, con .952% en la temporada 1999-2000, también con los Lakers.
Del otro lado, los Rockets fueron liderados una vez más por James Harden, que anotó 27 puntos y repartió siete asistencias, pero no fueron suficientes para dar la victoria a su equipo. Eric Gordon, con 24 puntos, aportó también ofensivamente a su equipo, anotando 6 de 12 intentos de triples.
P.J Tucker fue otro de los jugadores que mantuvieron a los de Houston en el encuentro, sobre todo gracias a su aportación defensiva ante la altura de los atacantes de los angelinos. Capturó 11 rebotes y no se quedó atrás con los triples, anotando 4 de 7 intentos.
La primera parte fue toda de los Lakers. Al medio tiempo, se fueron 67-51, con 16 puntos de ventaja. La aportación de Morris desde el banquillo, con tres triples seguidos, sirvieron para poner una distancia considerable entre ambos equipos.
Pero los Rockets no habían dado la última palabra y en el tercer cuarto, en apenas ocho minutos, anotaron 8 de 9 triples y lograron ponerse por delante (85-80). Durante ese penúltimo período, anotaron 41 puntos que les sirvieron para remontar, por apenas 23 de los Lakers, que ya no se mostraban tan superiores como en la primera mitad.
Sin embargo, el estilo de juego de los Rockets, basado en el tiro de tres, termina siendo una lotería. Pueden tener buenas rachas anotadoras como en el tercer cuarto, pero cuando cuando no entran, se meten en problemas. Y fue entonces cuando LeBron se puso a los mandos de su equipo para remontar en el último cuarto y dar el golpe definitivo, igualando la serie y liderando a unos Lakers que sueñan con el anillo.
