Este artículos está dirigidfo a motorizados y personal que realizan actividades como rescatistas, bomberos, Protección Civil, policías, moteros, etc
Los cascos certificados tienen tres funciones principales:
- Reducen la desaceleración del cráneo y, por lo tanto, el movimiento del cerebro al absorber el impacto. El casco absorbe parte del impacto y, en consecuencia, la cabeza se detiene con más lentitud. Esto significa que el cerebro no choca contra el cráneo con tanta fuerza.
- Dispersan la fuerza del impacto sobre una superficie más grande, de tal modo que no se concentre en áreas particulares del cráneo.
- Previenen el contacto directo entre el cráneo y el objeto que hace impacto, al actuar como una barrera mecánica entre la cabeza y el objeto.
Además protege al usuario de los rayos solares.
Algunas personas comentan que el problema del casco es que no conserva el peinado y provoca sudoración de la zona craneoencefálica.
Un casco certificado es de gran utilidad en caso de un siniestro vial o golpe por impacto, en caso de estar atendiendo o como víctima en una situación policial, de rescate urbano, siniestro vial, entre otros. Sin embargo existen tres errores comunes al utilizar un casco certificado:
- Se utiliza desabrochado.
- Se utiliza con gorra.
- No se utiliza un casco propio o adecuado a la función a realizar, es el caso que por ejemplo, vemos cantidad de motorizados con cascos para ciclismo.
La gorra está fabricada y diseñada "sólo para uso externo", es decir, no para usar dentro de un casco de material relativamente grueso. Representa un elemento adicional, innecesario y de alto riesgo para desvirtuar la esencia de utilizar el casco.
En primer término por el grosor de la tela de la gorra en sí, lo cual será de gran ayuda para deslizar el casco en caso de un impacto fuerte lo que evidentemente inutilizará la protección que supone tener un casco.
En cuanto al tema de la visera, al tener un casco colocado y abrochado pero además tener una gorra con la visera hacia adelante, tendremos algunas posibilidades de problemas:
- Menor campo visual en el eje vertical, sobre todo al mirar hacia arriba (motorizado, rescatista, policía, trabajador de fábrica, policía, etc...).
- Dificultad para desplazarse por espacios confinados o estructuras colapsadas.
Al tener el casco, colocado y abrochado con una gorra también y ésta colocada con la visera hacia atrás, tendremos estas posibilidades:
- Menor o nula posibilidad de movimiento de la cabeza hacia arriba lo cual es un gran problema para rescatistas y funcionarios policiales al estar dentro de una estructura o espacio confinado.
- Posibilidad de lesiones al tener roce constante entre la visera y el cuerpo.
En algunos casos, dificultad para mover la cabeza para los lados (izquierdo y derecho) ya que si la visera es grande o está muy pegada, se comportaría como la mitad de un inmovilizador de cuello y cabeza, llamado comúnmente "collarín" cervical.
Todos los cascos para protección personal, han sido diseñados para ser utilizados sin gorra y abrochados.
Los cascos deben tener alguna certificación. Es imprescindible ajustar bien el casco al usuario para garantizar la estabilidad y evitar que se deslice.
Nota:
En el caso de pañoletas o bandanas, las mismas estas diseñadas para dar ciertos tipos de protección al cabello y al cuero cabelludo (temperatura, insectos, evita que la sudoración afecte la vista al controlar su desplazamiento, factores de humedad, etc), por ello se ven estas bandanas en cascos tácticos (los cuales los proveen de fábrica. Es decir, son recomendadas por cada fabricante) desde Afganistán o en la historia de los cascos de pilotos los cuales vienen todos con una especie bandana de tamaño justo para que quede dentro del cuero cabelludo aunque los primeros cascos militares venían con un "gorro de aviacion" el cual era parecido a las actuales 'monjas'.
Es por ello también que los cascos para incendios y algunos para operaciones urbanas de marcas reconocidas vienen con un protector integral de nomex que incluye cara y cabeza, conocido como "monja".
Los moteros de rutas largas y otros club profesionales en el mundo, utilizan bandanas (y no gorras) debajo de sus cascos algunos también las llaman "quillas".
Opinión médica:
"Otro elemento del casco más allá de la protección craneo-encefálica es que, cuando el casco es integral y certificado tiene una protección facial adicional, reduciendo éste tipo de lesiones durante los hechos viales en moto, además, una vez sufrido el traumatismo, el caso certificado al ser de la talla óptima para su usuario, sirve como elemento comprensivo que puede reducir la rata de sangrado en lesiones craneales superficiales, no así en lesiones encefálicas, algunos cascos generan una ligera protección de la columna cervical al reducir moderadamente el movimiento del eje de compresión vertical cuando el borde inferior del casco llega a los hombros, por ello la recomendación de retirar el casco bajo control de un equipo integral y no en la escena del evento". -Dr. Aquiles Reyes.
Para finalizar este interesante tema en donde los verdaderos profesionales diferencian las gorras de las bandanas, es importante concluir que el uso correcto de cualquier implemento en operaciones de búsqueda y salvamento busca optimizar la seguridad integral del hombre de rescate y de la misión en general.