Trabajos y materiales de mala calidad caracterizan las obras ejecutadas por la Alcaldía de Naguanagua, lo que inevitablemente genera en pérdida y despilfarro de recursos en reparaciones de averías en calles y avenidas.
Así lo denunció Jorge Montes, ex candidato a la Asamblea Nacional, quien explicó que debido a reiteradas denuncias recibidas por vecinos de la entidad, junto a expertos, hizo un recorrido por diferentes comunidades afectadas, a fin de corroborar las quejas.
Acompañado por un ingeniero civil y un arquitecto, se dieron a la tarea de pasearse por las diferentes calles y avenidas reportadas por los afectados, para constatar el estado de las obras realizadas por el gobierno municipal recientemente, donde se pudo observar el deterioro y hundimiento del asfaltado.
En las calles 23 de Enero, Rivas Dávila y en la avenida Andrés Eloy Blanco, pertenecientes a la comunidad Barrio Unión, a finales de febrero de este año se sustituyeron tuberías de aguas servidas que estaban obstruidas y una vez reemplazadas, colocaron relleno y pavimentaron a las calles. Pero, a escasas 3 semanas de culminar la obra, ya el pavimento había cedido.
Según los datos aportados por el arquitecto Márquez, estos trabajos requieren resolver en primera instancia la causa del hundimiento del pavimento (bote de aguas servidas), si persiste la filtración de agua, -que pudiera ser la causa-, esta aparecerá de nuevo al poco tiempo, provocando un ignorado hundimiento.
“Sí se soluciona el problema que causó el hundimiento original, sin una adecuada compactación, inevitablemente se volverá a hundir; de igual forma, si el material de préstamo no tiene la calidad requerida”, precisó el arquitecto.
De la misma forma explicó que la capa de rodamiento, junto con las especificaciones anteriores deben ser de calidad, para que pueda soportar vehículos pesados, que se espera transite por la zona.
Así como el material de rodamiento, el cual, por ejemplo, debe ser de Maco maco, cada 20 cm; se debe aplicar con compactadora mecánica; el espesor de la capa de rodamiento, -en el caso de asfalto debe ser entre 8 y 10cm-. Y si es de concreto, este debe ser mínimo de 10 centímetros, junto a otras especificaciones técnicas, detalló Márquez.
Otras causas del hundimiento se puede deber, dijo la ingeniero Raga, a la mala calidad del granzón o que el mismo no fue compactado cada 20 o 30 centímetros, según los parámetros de calidad. Por otro lado la propiedad del asfalto y el incumplimiento en las especificaciones de grosor del mismo, pueden incidir en que la calle se deteriore fácilmente, ya que para este tipo de vialidad las capas de asfalto deben ser de 9 a 10 centímetros; y al no ser compactadas debidamente se deterioran con facilidad.
La experta también advierte que la aplicación del asfalto bajo la lluvia dañaría la calidad del trabajo; “ya que está es un mezcla en caliente que no debe ser aplicada de presentarse precipitaciones atmosféricas”, reiteró.
El trabajo solo duró 11 días
La inspección también los llevó a la calle 191 con la avenida Universidad, dónde el pasado 16 de marzo el alcalde Gustavo Gutiérrez inició las reparaciones y sustitución de tuberías de aguas negras, cuyos trabajos culminaron el 18 del mismo mes, precisó Montes.
El dirigente expuso que, apenas once días, el día 29 de marzo, ya el pavimento había cedido, demostrando así la mala calidad de la obra, por lo cual nuevamente la alcaldía se vio en la obligación de rehacer los trabajos en mayo.
Esto, sin lugar a dudas ocasiona un doble gasto del presupuesto, ya que los trabajos ejecutados no cumplieron con los estándares de calidad necesarios, para que la misma perdurará en el tiempo y los recursos, pudieran ser destinados a otro proyecto, obra o necesidades que demandan las comunidades de Naguanagua.
El pozo Los Vencedores solo funcionó 9 meses
Montes, líder político y coordinador de la Organización Ciudadanos, además aseguró, que no es la primera vez que situaciones similares ocurren en el municipio, ocasionando perjuicio a los intereses de los naguanaguenses.
El pasado 24 de marzo del año 2020 en la comunidad Colinas de Tarapío, el alcalde Gutiérrez prometió la reactivación del pozo Los Vencedores, dónde fueron instalados: motor, bomba de agua, entre otros implementos, después de permanecer 9 meses inactivo.
Según el alcalde, esto beneficiaría a 1.571 familias. “Esto fue falso, ya que el servicio de agua potable solo se restableció para 430 familias. Para sorpresa de los habitantes de la zona, solo 21 días estuvo operativo, sin que hasta ahora las autoridades hicieran acto de presencia en el sitio, para verificar las fallas que impedían el abastecimiento a estas familias”.
Obras se mantienen por autogestión vecinal
Montes recordó que, el 14 de noviembre de 2020, en virtud de la negativa de la alcaldía de revisar y dar garantía a los trabajos realizados. Harry y Uzcátegui, organizaron un grupo de vecinos de Colina de Tarapío, y a través de autogestión con el apoyo de Hidrocentro lograron reactivar el pozo. “Tuvimos que reponer el motor y la bomba, que recién había instalado la alcaldía. “Hasta la fecha, dicho pozo se encuentra totalmente operativo”.
“El llamado es al alcalde Gustavo Gutiérrez para que tome conciencia de la necesidad de ejercer contraloría en cada obra que se ejecute, ya que los recursos de los naguanaguenses, destinados para obras públicas, deben ser hechos con calidad, para evitar su deterioro inmediato, en beneficio de más de 200 mil habitantes del municipio”, recomendó.
“Se esperan que los problemas de más de 184 comunidades sean resueltos de manera oportuna y no que tengan que repetirse y seguir despilfarrando el dinero del pueblo”, aseveró Jorge Montes.
De la misma forma, Jorge Montes exhorta a los vecinos de Naguanagua para que, a través de sus denuncias, ayuden a que las obras, programas y metas de gobierno se cumplan, tal cual como sean programadas: en el tiempo, el costo y la calidad establecida.
