El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, recibió este lunes con honores de Estado al canciller alemán, Olaf Scholz, el primer mandatario extranjero que realiza una visita oficial al país desde que el exsindicalista volvió al poder.
Lula y Scholz, ambos del campo progresista, se saludaron con afecto en lo alto de una rampa que conduce al palacio presidencial de Planalto, que el canciller alemán subió por un pasillo formado por soldados del regimiento Dragones de la Independencia, vestidos con uniformes históricos.
Scholz llegó ese mismo lunes a Brasilia, última escala de una gira por Suramérica que lo llevó antes a Argentina y Chile.
Tras la recepción oficial, los mandatarios tendrán una reunión privada a la que luego se unirán algunos ministros y al cabo de ese encuentro comparecerán ante los periodistas para una declaración conjunta.
El programa oficial del canciller alemán en la capital brasileña concluirá con una cena que será ofrecida por Lula en el Palacio de Itamaraty, sede de la cancillería brasileña.
Canciller alemán Olaf Scholz
En la agenda que discutirán Lula y Scholz figura un amplio abanico de asuntos, pero sobresalen la cooperación en materia medioambiental y la retomada del apoyo financiero alemán a programas de protección de la Amazonía.
La renovación de ese apoyo, de hecho, comenzó este mismo lunes, en una reunión entre la ministra de Medio Ambiente de Brasil, Marina Silva, y la titular de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania, Svenja Schulze, quien anunció un paquete de ayuda inicial de 35 millones de euros.
Ese dinero será destinado al Fondo Amazonía, constituido en 2008 por Alemania y Noruega, pero suspendido en 2019 por decisión del ahora expresidente brasileño, Jair Bolsonaro, y será utilizado en planes para la protección de la Amazonía y apoyo a la etnia yanomami, que enfrenta una gravísima situación sanitaria.
