El presidente venezolano Nicolás Maduro dijo este sábado que evalúa premiar a los beneficiarios del carnet de la patria -tarjeta para acceder a programas sociales del gobierno- que voten en las presidenciales del 20 de mayo.
Todo el que tenga carnet de la patria tiene que votar, eso es dando y dando. Estoy pensando en darle un premio al pueblo de Venezuela que salga a votar ese día, con el carnet de la patria, expresó el mandatario durante un mitin en el estado Anzoátegui. «Por la democracia, por la libertad, dando y dando: recibo mi derecho social al trabajo, al estudio, a la pensión, pero yo le doy a la patria mi voto».
Los principales rivales del presidente en los comicios, el exgobernador Henri Falcón y el pastor evangélico Javier Bertucci, han denunciado el ventajismo del mandatario durante la primera semana de campaña, especialmente por el uso de recursos públicos para promover su candidatura.
Falcón acudió el miércoles al poder electoral -acusado de servir a Maduro- para exigir que cese la propaganda del mandatario en los medios del Estado.
Solo este sábado la televisora pública VTV ha transmitido en vivo tres actos de campaña de Maduro. El lunes, el presidente apareció seis veces en ese canal, entregando 36 casas.
En pantalla, el presidente ofrece bonos económicos y mejorar programas como el de distribución de cajas de comida a precios subsidiados, en medio de una escasez de alimentos y medicinas y una hiperinflación que este año podría superar 13.800%, según el FMI.
La rectora del Consejo Nacional Electoral (CNE) Sandra Oblitas pidió el miércoles a los medios «mantener la cobertura informativa equilibrada» y recordó que los entes públicos «están impedidos de intervenir en la campaña».
La ley contra la corrupción en Venezuela prohíbe el uso de bienes públicos para favorecer a partidos o proyectos políticos.
Falcón, disidente del chavismo, postuló a contracorriente de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que decidió boicotear los comicios alegando que carecen de garantías y solo son un «simulacro» para perpetuar a Maduro.
