(Foto AVN)

El presidente pidió a los empresarios de alimentos que vendan 50% de su producción a los CLAP. Reconoció que del pernil que debía ser distribuido por el Gobierno solo se ha entregado la mitad, igual que con los juguetes prometidos

@LABC7 

Los productos alimentarios deberían ser puestos a la orden del Estado, sugirió el presidente Nicolás Maduro este miércoles. “Las cosas se hacen en la práctica, o no se hacen”. Comentó que se reunió con empresarios y les pidió que vendan 50% de su producción al Gobierno para repartirlo a través de los Consejos Locales de Abastecimiento y Producción (Clap). El restante, que va a cadenas privadas, debe tener una vigilancia estricta. “Queda terminantemente prohibido condicionar la venta de productos básicos a la compra de otros de la misma empresa”.

Puso como ejemplo la harina de maíz precocida. “No sé por qué pongo ese ejemplo. Por qué se me viene a la cabeza, ¿verdad Castro Soteldo? (ministro de agricultura)”. Si se produce un millón de paquetes de harina, “véndame la mitad para que vea cómo yo lo coloco en manos de cuatro millones de familias”, dijo luego.

Los productos no se consiguen, reconoció el mandatario. Y fijó la falla en la distribución. “Hay que acabar, cortarle todas las redes, a las mafias parásitas, especuladoras, bachaqueras”, pidió a sus ministros. En el primer trimestre del año 2017 la profundización del plan de intervención de las redes de distribución debería continuar. “La mayoría de los empresarios de este país tomaron conciencia, que el gran aliado que tienen se llama Nicolás Maduro Moros”.

Dos millones de perniles fueron distribuidos, pero falta la mitad. “Hay que optimizar la distribución”, pidió. Lo mismo pasó con los más de cuatro millones de juguetes incautados a Kreisel, que no se han entregado completos y están “en plena distribución”. La Gran Misión Abastecimiento Soberano y Seguro fue un éxito, aseguró. Hay supervisión militar en 900 de las más importantes empresas del sector farmacéutico, agroalimentario e industrial.

Lo que pasó en diciembre forma parte de cosas que más nunca pueden volver a ocurrir. Maduro no vaciló en achacar los disturbios por comida y por la crisis que generó el nuevo cono monetario a mafias extranjeras. Dijo que desde Colombia se pagó, con dinero proveniente del narcotráfico, a grupos violentos que generaron violencia en La Fría (Táchira) y Ciudad Bolívar (Bolívar), apoyados por dirigentes de oposición.

Se refirió a las empresas expropiadas. Puso como ejemplo el caso de la fabricante productos de higiene Kimberly-Clark. Otras empresas están a 20% de su capacidad y el Gobierno las ha llevado a 40%. “Hemos hecho milagros, pero el precio del barril de petróleo se nos vino encima. De 40 a 20 (dólares por barril). Hemos aprendido a hacer con poco”.

Durante el acto de salutación de fin de año a las Fuerzas Armadas en Carabobo, Maduro exhibió como un logro que más de 379 mil milicianos están desplegados en el país. “Hasta el último rincón, el último barrio del país”. Pero se necesita más. Y los recursos están disponibles. También inauguró la sede del 24 de junio y pidió hacer del Campo de Carabobo  y su monumento un destino turístico nacional e internacional.

Minutos después del desfile militar, Maduro prometió que las fuerzas tácticas y especiales de las Fuerzas Armadas serán repotenciadas con tecnología armamentística de última generación. “Ya he aprobado los recursos, gracias a Dios los tenemos”, para la compra de armamentos. Vladimir Padrino, ministro de Defensa viajará a China y Rusia para cerrar los acuerdos y traerse la tecnología. “Para la paz y para el combate”.

Maduro prometió 10 años más de revolución. “Bienvenido 2017. Aquí estoy como soldado, listo para la batalla. Feliz año de victoria, de batalla, de fortalecimiento. 28 de diciembre: se inicia la nueva era de victoria de la revolución bolivariana 2016-2026”.

El próximo sábado 14 de enero se iniciará un despliegue nacional de fuerzas militares, milicianas y populares. Le denominó Ejercicios Zamora 200. “A buen entendedor, pocas palabras. Nadie respeta a los débiles en el mundo de hoy”.




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