El presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, Guillermo Manosalva, expresó que el decomiso de tres millones 800 mil juguetes a la distribuidora Kreisel, por parte de la Superintendencia Nacional de Precios Justos (Sundde), es otro «dakazo».
Manolsalva relacionó la actuación de la Sundde, con el anuncio hecho hace unos dos meses por representantes del Gobierno relacionado con la llegada al país de un lote de juguetes y adornos de Navidad.
El dirigente gremial considera que los dueños de Kreisel fueron quienes salieron más gananciosos de la operación en dólares baratos para traer juguetes de afuera. Dijo que pocos comerciantes cuentan con recursos suficientes para tener tres millones de juguetes.
“Los comerciantes serios ni de broma nos atrevemos a tener un inventario de ese tipo, porque sabemos a lo que nos exponemos, es decir lo que le está pasando a Kreisel”, comentó.
Manosalva sostuvo que el gobierno está montando un nuevo show, como lo que hizo con Daka en el 2013. Advirtió que es probable que actos de este tipo se realicen en supermercados que tengan alimentos a precios importados.
La idea del gobierno, según Guillermo Manosalva, es poder asegurar los ingredientes de las bolsas de los CLAP porque no tiene cómo traer mercancía del exterior, ni cómo comercializarla.
El presidente de la Cámara de Comercio de Valencia estima que la actuación del gobierno tiene dos intenciones. Una aparentar ante la población que actúa como una especie de Robin Hood, y otra dejar mal parados a los comerciantes venezolanos, de manera que la gente los vea como un ser despreciable o un sicario, tal como lo señaló el director de la Sundde, William Contreras.
