El 1 de enero el diario más antiguo de Venezuela cumplió 113 años de fundación, sin embargo, la celebración ha sido pospuesta porque un día antes, el 31 de diciembre, se imprimió la última edición que marca el inicio de un cese de circulación del medio impreso por falta de su principal materia prima: bobinas de papel periódico.
Desde la Corporación Editorial Alfredo Maneiro (Ceam), único organismo que puede importar este insumo, no ha habido respuestas para El Impulso, como lo han indicado el presidente del periódico, Carlos Eduardo Carmona, y el director, Juan Manuel Carmona.
El lunes 2 de enero, cuando debería encontrarse el impreso en los quioscos de la entidad larense, los lectores sintieron la amarga noticia de no poder adquirir el diario que acompañan con el café cada mañana, desde hace varias décadas.
Alfredo Ramos, alcalde del municipio Iribarren, ofreció una rueda de prensa para mostrar apoyo a El Impulso, como también para condenar la forma en que el gobierno nacional insiste en ejecutar una hegemonía comunicacional, con medios afectos a sus designios.
José Ignacio Guédez, de la Causa R, manifestó que la memoria de Alfredo Maneiro está siendo pisoteada, porque este venezolano jamás hubiese promovido ni aceptado la censura y la presión a los medios de comunicación independientes, en este caso, con la discriminación en la venta del papel periódico.
Volanteo, marchas y caminatas
Por parte de la Red de Instituciones Larenses, conformada por profesionales de varios gremios -docentes, abogados, periodistas, médicos, sociólogos, economistas y politólogos- han planteado una serie de actividades a favor de El Impulso. Comenzarán con entregar un comunicado este próximo miércoles.
El jueves 4 de enero realizarán entrega de volantes en varios puntos de la ciudad, para que la sociedad tome parte activa en la defensa de las libertades democráticas, reflejadas en la Constitución Bolivariana de Venezuela, como la libertad de expresión y el derecho al trabajo.
Para el viernes organizan una marcha, cuya ruta están estudiando, pero tendrá hasta ahora dos puntos de concentración: la sede de Corpolara, dirigida por el exgobernador de Lara, Luis Reyes Reyes; y el edificio El Impulso, con el objetivo de presentar su apoyo a los más de 180 empleados que se encuentran en incertidumbre por el cese de circulación del periódico.
De ser necesario y de aún no obtener respuestas la semana siguiente, es probable que un grupo de trabajadores y amigos vayan hasta la sede de la Corporación Maneiro, para exigir respuestas al ente gubernamental.
Denuncia ante la OIT
Marco Ruiz, secretario nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (Sntp), presentará una queja ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), porque los derechos de los trabajadores que son vulnerados por un capricho de los funcionarios del Gobierno, sean restablecidos.
También entregará comunicaciones a la Corporación Maneiro, a la Fiscalía General de la República y a la Defensoría del Pueblo, en donde estima que los funcionarios públicos tendrán que responder ante la aberrante decisión de no entregar papel a El Impulso.
Por parte de la delegatura sindical local, se estableció un plan de contingencia para los primeros 15 de enero, con el objetivo de continuar con las actividades propias de la empresa, pero con personal dividido en guardias.
Esta situación fue notificada el lunes 2 de enero en la Inspectoría del Trabajo, en Barquisimeto, donde recibieron el documento que advierte sobre la falta de materia prima para continuar imprimiendo El Impulso. La funcionaria de guardia del Área de Recepción de Documentos, aseguró que sería incluida en un archivo de correspondencias dirigidas al actual Inspector del Trabajo.
