Una alerta en torno al HLB, enfermedad que viene afectando a la citricultura venezolana, dio a conocer a la opinión pública Marcos León Guinand, expresidente de la Federación Nacional de Fruticultores (Fedenafrut).
La catástrofe derivada de la presencia del HLB, debería servir para que los gremios de citricultores y los industriales de la naranja, sellaran de una vez por todas un acuerdo firme para enfrentar esta situación, que implique que la agroindustria acepte de una buena vez, retener un porcentaje del precio que le cancela al productor, aportando a su vez un porcentaje adicional de sus propios recursos, para ser destinados a la investigación, a la extensión y a la lucha gremial, señaló Guinad.
Un pequeño insecto no mayor que un grano de arroz podría pasar desapercibido en sus árboles de cítricos. El psílido asiático de los cítricos se alimenta de las hojas y tallos de cítricos, y puede infectar a los árboles de cítricos con una enfermedad seria de las plantas llamada Huanglongbing, también conocida como HLB o enfermedad del enverdecimiento de los cítricos. Aun cuando no es dañina para los humanos, la enfermedad mata a los árboles de cítricos y no tiene cura, detalló el declarante.
Es de primordial importancia felicitar a los investigadores de las Universidades, del IVIC y del resto de las instituciones tanto públicas como privadas que se han dedicado con mucho ahínco, tanto a diagnosticar la presencia del HLB en el país, como a proponer las acciones pertinentes para enfrentar esta terrible enfermedad. Para ello se debe hacer más énfasis en los programas que nos permitan sobrevivir dos o tres años más enfrentando directamente a la “diaphorina citri”y proponiendo cultivos que a corto plazo nos permitan superar la crisis económica derivada de esa terrible enfermedad, aseguró el expresidente de Fedenafrut.
León Guinand considera que los gremios que trascienden y dejan huellas, son los que cuentan con recursos económicos suficientes, provenientes del aporte de sus agremiados, como Asoportuguesa y Amiga, entre otros, ello solo es posible si se procede a la retención autorizada frente a la Agroindustria. Los escasos bienes con que cuentan hoy en día las asociaciones de citricultores provienen de la época en que se retuvo y pagó a los gremios el aporte convenido por la venta de la fruta a la industria, afirmó el vocero de este sector.
Nota de Prensa
