Los números son dramáticos. Más de 500 empleos se han perdido en la pequeña y mediana industria de Carabobo durante los últimos seis años, como consecuencia del cierre de empresas que no pudieron sobrevivir a la crisis.
Esto se traduce en el cierre de 119 industrias que, en promedio, tenían entre cinco y siete empleados, y que representan 35% de todo el sector en la entidad.
Las que aún luchan por mantenerse productivas se enfrentan a diferentes problemas. Antonello Lorusso, presidente de Cámara de Pequeños y Medianos Industriales y Artesanos de Carabobo (Capemiac), aseguró que el principal inconveniente que tienen en este momento son las derivadas por las fallas eléctricas.
También son víctimas directas de la importación voraz de productos sin aranceles. “Eso nos afecta a todos. Se consiguen productos importados que entran al país libremente y nosotros pagamos todo tipo de impuestos. Es una competencia es desleal”.
La falta de combustible es otro de los problemas que deben enfrentar, así como las cargas impositivas de las diferentes alcaldías que hace muy difícil la operatividad de las empresas. Para ello han pedido reunirse con los encargados municipales de hacienda para establecer mesas de trabajo que arrojen soluciones.
70 % sin operatividad
Todo ese conjunto de inconvenientes ha provocado que 70 % de las pequeñas y medianas industrias de Carabobo estén inoperativas. El sector más afectado es el metalgráfico porque su actividad ha caído de forma considerable.
“Ya nadie hace material POP, tampoco se imprimen revistas y como se importan tantos alimentos, esa industria produce menos y se reduce también la manufactura de empaques”. Las industrias del plástico y las metalmecánica también están pasando por un mal momento por falta de materia prima que depende delas empresas básicas del estado.
La diáspora fue un factor negativo para los agremiados a Capemiac porque perdieron a personal muy valioso y no se ha contratado a nadie porque la producción no lo amerita. “Por eso estamos haciendo todo lo posible por mantener a quienes nos quedan. Les damos incentivos económicos y apoyamos con su formación constante con cursos y talleres”.
Están apostando al emprendimiento. Para que se afilien a la cámara que está realizando un directorio digital donde podrán exhibir sus productos y ser contactados por proveedores de materias primas.