Estoy firmemente convencido que desdecirse cuando uno reconoce haber cometido un error, es un acto de honestidad profesional. El tiempo pasa, las situaciones cambian y creo que es una cuestión de ética periodística y un acto de decencia y de hombría reconocer haberse equivocado. Pues bien, hoy día, a través de este prestigioso medio de comunicación quiero retractarme  publicamente de unas declaraciones hechas hace tiempo cuando afirmé que un pueblo no es responsable del gobierno que tiene. A tal propósito hacía referencia al pueblo cubano, el cual, según mi modesta opinión, no tenía ninguna responsabilidad por la sangrienta dictadura castro comunista que venía sufriendo desde 1959. Fidel Castro había entrado en La Habana como aparente portador de libertad y de democracia, prometiendo  elecciones a muy corto plazo y sin embargo, tan pronto asumió el control absoluto de todos los poderes se declaró “marxista-leninista”no solamente imponiendo la más terrible y la más sangrienta de las dictaduras, sino tratando de exportarla a otros países, incluyendo a Venezuela. Ahora bien,  frente a ese cuadro dramático que ha enlutado a toda América, ¿qué culpa tenía el pueblo cubano?

Evidentemente ninguna y esto no lo retracto sino que lo ratifico! Sin embargo como creo haber generalizado el caso de Cuba, hoy quiero corregirme y retractar ese “NO”tajante que escribí en ese tiempo relevando a los pueblos de toda responsabalidad, porque la experiencia ha demostrado que ese no era un “NO”categórico y absoluto,como sin duda alguna lo ha sido para el pueblo cubano  sino un “no” relativo, porque hay casos, como por ejemplo el que estamos viviendo en carne propia en nuestra desdichada Venezuela, en el cual el pueblo sí es  responsable del gobierno que tiene. Por ejemplo en este país hay millones de ciudadanos, incluyendo a muchos profesionales y personas aparentemente preparadas (por lo visto solo aparentemente) perfectamente concientes de la dramática situación que vive el país que por ignavia, porque víctimas de un profundo lavado cerebral o por temor de perder una serie de privilegios de los cuales vienen disfrutando es que siguen apoyando con su voto o con su abstención los abusos de este gobierno autoritario el cual necesita a como de lugar de ese consenso falso y mercadeado para poder seguir simulando una parecencia de democracia y seguir…subsistiendo.

Es por eso entonces que tengo que retractar esa citación hecha hace tiempo y afirmar con mucha tristeza e infinita amargura que, así como hay pueblos como el cubano, que no son responsables por el gobierno que tienen, del mismo modo  hay pueblos, como el venezolano, que si son responsables por lo que está sucediendo en este país. La esperanza que tengo, por el amor que le llevo a esa tierra bendita por Dios es que ese pueblo, que de “bravo” hasta ahora no ha tenido nada, tome finalmente conciencia y recapacite.

Desde Italia   –  Paolo Montanari T.

 




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